Quimsa mostró demasiados altibajos durante el 2012. A pesar de eso, el equipo terminó arriba. Eso lo valora Fabio Demti, su entrenador, pero también asume el desafío de lograr una mayor regularidad y consolidarse como equipo.
“Por la posición estamos conformes, estar entre los cinco primeros es lo que habíamos pensado. En lo personal pienso que el equipo podía haber dado un poco más, tuvo oportunidades que desaprovechó, especialmente de local. Podríamos tener algunos puntos más y estar mejor ubicados. En la tabla estamos en el lugar que queremos, pero el equipo fue irregular. Si bien ganó muchos juegos afuera, de local pudo haber ganado algunos más. Dejó pasar oportunidades claves para estar un poco más arriba”, explicó el entrenador de Quimsa sobre el año de su equipo.
Consultado sobre las causas de esa irregularidad, respondió: “En el comienzo nos costó el cambio de extranjero y me parece que en el final de esta etapa sentimos un poco el desgaste, se notó en algunos jugadores. Penka (Aguirre) estuvo 20 días jugando sin entrenar, ahí fue uno de los puntos donde se sintió el desgaste. Diego (Lo Grippo) también estuvo con algunas molestias. Fuimos irregulares porque dimos algunas ventajas desde lo físico y en algún momento de la competencia se paga”.
Demti se mostró dolido por haber cerrado el año con una dura derrota en casa ante Boca. “Nos queda un sabor amargo porque al partido lo pensábamos ganar. Y si perdíamos, no imaginábamos que fuese de esta manera. No merecía este grupo terminar así, pero se dio así y hay que afrontar la situación, dar la cara. Estoy muy tranquilo porque el equipo dio todo, pero fuimos superados tácticamente. De principio a fin Boca fue superior a nosotros y cuando se da un partido así, el entrenador se tiene que hacer cargo de la situación y les tiene que servir a todos como experiencia y como un aprendizaje, porque hay cosas que todavía nos faltan. Fuimos superados de entrada y en ningún momento tuvimos una reacción”.
Esa falta de reacción está tal vez asociada con el factor anímico, justamente lo que más le preocupa a Demti de cara al 2013, incluso por encima del juego. “Lo que más me preocupa es lo anímico. Me parece que cuando al equipo no le salen las cosas, baja la cabeza y anímicamente se viene abajo. Cada vez que jugamos bien, lo hicimos muy bien pero cuando el equipo juega mal, realmente juega mal porque no logra dar vuelta situaciones. Es como que hay una baja mental o anímica y no es actitud eso, la actitud los chicos la tienen, pero a veces pasa como el viernes que fuimos superados y que nos frustramos y a partir de ahí no podemos progresar”, comentó.
Demti cree que enero será clave porque “cuando pasen seis partidos más, ya no va a cambiar demasiado quienes van a pelear arriba y quienes lo harán abajo”. Por eso le apunta a consolidar el equipo. “Debemos mantenernos, aún podemos ganar algunas posiciones. Será muy importante asegurar el tercer o cuarto lugar. Creo que el equipo está en condiciones de hacer eso, pero tenemos que prepararnos mucho”, cerró.
Entrevista: Diario El Liberal