Si hay maneras lindas de arrancar la última parte del año para cualquier equipo de esta Liga Nacional de Básquet, esa es ganar lejos de casa. Aunque el sufrido 70-69 de Argentino sobre Lanús en el Antonio Rotilli (tercera victoria seguida allí para el Turco) tuvo un conjunto de sin sabores: si bien ganó, el equipo no reflejó un gran desempeño y Adrián Capelli no lo ocultó. ”Hoy ellos no están en un buen momento, está para pisarle la cabeza y casi dejamos pasar la oportunidad. Nos faltó agresividad y es un lujo que no nos podemos dar”, analizó tras la eufórica alegría en diálogo con FM Diferente.

De esta manera, el conjunto del barrio de Las Morochas suma 12 unidades y ya piensa en ir a visitar al durísimo Gimnasia y Esgrima de Comodoro, que arriba a esta jornada como uno de los mejores quintetos de la competencia.

El inicio del partido fue parejo. Lanús cargó las cuatro primeras ofensivas en la zona pintada, encontrando allí gran fertilidad (3/4 en dobles); por su parte, Argentino buscó por el mismo lado con la misma efectividad (3/4). Sorpresivamente, a pesar de que Kavon Lytch quedó en el banco de suplentes para el arranque, el Granate halló en Ariel Eslava un goleador (cuatro puntos) en los primeros minutos; el Turco se respaldó en Anthony Myles (cuatro).

Nada cambió en el transcurso del tiempo restante: paridad, juego interno y Myles se cargó el liderazgo en cada ataque visitante. Por eso, Miguel Volcan Sánchez decidió sacar a Demetrius Proby porque no pudo frenar al pivote rival, quien le metió ocho en poco más de 5´. A esa altura, el tablero mostraba el 19-17 a 3:46.

El cierre no mostró nada distinto en cuanto a lo parejo que se había presentado el primer cuarto. Aunque, a diferencia de lo que fue el desarrollo previo, se observaron muchos yerros al punto que terminaron 21-19 en favor de los conducidos por Adrián Capelli.

Después de una amanecer complicado en el segundo parcial (2-6), pero de la mano de Franco Balbi y Lucas Pérez, el Turco reaccionó e impuso su juego por momentos. De hecho, tras el triple del ex base Granate (28-25), Sánchez frenó el juego con un minuto buscando que los suyos despierten, algo que consiguió y rápidamente consiguieron dar vuelta el trámite con un buen pasaje de Federico Ferrini (32-30).

Sin embargo, con una mayor efectividad dentro del pobre pasaje del juego, los juninenses se posicionaron de mejor manera. Nuevamente Balbi, acompañado por Marcus Melvin, depositó al frente a su equipo. Por eso, al final del primer tiempo el resultado fue 37-34 con 11 del Cabezón.

La película no sufrió alteraciones. Cada escena de la etapa anterior siguió mostrándose en el tercer capítulo, más allá del 48-41 que llegó a ostentar Capelli y compañía, arribando 50-50 a 2:00 para el sonido de la chicharra. No obstante, una bomba desde 6,75 de Ferrini dejó adelante al dueño de casa, que aprovechó la poca paciencia del Turco a la hora de atacar. La cosa no cambió e ingresaron 55-52 al último parcial.

Si bien el encuentro no fue emocionante desde lo técnico, sí lo fue desde lo que ofreció en lo referido al tanto a tanto. Por eso, a sólo 1:21, como consecuencia de un doble de Lytch, luego de un rebote en ataque (quinto del foráneo en esa faceta), el Granate sacó algo de luz (67-63) y todo parecía inclinarse para este lado.

Pero ahí, apareció un triple increíble de Melvin para empatar 68-68. Un libre de Lytch volvió a dejar a los del sur del Gran Buenos Aires adelante por uno; aunque allí apareció la inmensa figura de Balbi. El ex Quimsa de Santiago del Estero dejó callado al Antonio Rotilli: se mandó contra la marca del ala-pivote foráneo y se metió la victoria en el bolsillo. Luego, defendió bien Argentino para llevarse la primera alegría de la segunda fase.

De esta manera, el conjunto de Capelli cosechó un triunfo en la ruta con la importante que es esto. A su vez, tras el partido, el DT del Azul se mostró disconforme con el rendimiento que desarrollaron sus dirigidos.

Crónica: deportedejunin.com.ar