Más allá de su delicada situación deportiva de hoy, Quilmes es noticia en estos días porque ganó cuerpo en los medios la posibilidad de que se aleje de la Liga Nacional de Básquetbol tras 22 años de apostar de lleno por esta competencia. «Jamás entre nosotros hablamos de la posibilidad de vender la plaza», expresó Daniel Cotignola, dirigente Cervecero.
Daniel Cotignola, integrante de la Comisión de Liga Nacional de Quilmes, recibió a LA CAPITAL para dialogar sobre el tema en su negocio particular. Una pintura de una realidad del básquetbol argentino: no hay casi dirigente que pueda perder de vista sus propias ocupaciones y dedicarle tiempo completo a un club.
Cotignola no esquivó ningún tema. Anunció que Quilmes no se irá de la Liga Nacional. Y que lucharán por cambios en la estructura de la competencia para sanear las economías de los clubes.
¿Es concreta o no la posibilidad de que Quilmes venda su plaza de Liga Nacional?
Jamás entre nosotros hablamos de la posibilidad de vender la plaza. Pero sí del desgaste, del cansancio. Yo tuve que viajar tres veces en las últimas semanas a La Plata para hablar con el comisario Pérez y ver cómo teníamos que hacer las cosas en relación a la seguridad. El episodio de Olavarría produjo un desbarajuste tremendo. No somos muchos los que laburamos en el básquetbol de Liga Nacional del club. Haciendo un mea culpa, un poco de lo que le pasa al equipo es responsabilidad nuestra. Hubo tantas cosas que atajar, que uno le sacó la vista a cuestiones que, a lo mejor, pudieron hacer caminar lo deportivo un poco mejor. El último lunes Rígano comentó lo que había dicho y que provocó tanto revuelo. Simplemente que estaba cansado de luchar contra los fantasmas, contra las cosas que no se ven, y que había que replantearse bien el futuro de la Liga.
Te doy vuelta la pregunta, ¿hoy podés confirmar que Quilmes va a jugar la próxima Liga Nacional?
Sí, puedo asegurar que jugaremos la próxima Liga. Pero, en principio, no sabemos qué va a ocurrir con el futuro de la competencia. A veces uno le echa las culpas a la AdC y se olvida que esa asociación la formamos todos los clubes. Yo creo que tendría que haber una reunión entre la Mesa Directiva y los responsables de todos los clubes para tomar alguna resolución que nos favorezca un poquito a todos. Como iniciativa de club, creo que la Liga Nacional, para sanearse un poco, se tiene que cerrar uno o dos años.
¿Qué implica cerrar la Liga?
Tenerla uno o dos años sin ascensos ni descensos. No está en el ánimo perjudicar a alguien, pero creo que sólo cerrando la Liga se podrá sanear la economía de los clubes. Todos vienen a los tumbos. Y a más de uno le vendrá bien jugar con dos americanos y con jugadores jóvenes, incluso con posibilidades de apostar un poco más a las bases. Si seguimos igual, estamos listos. Hoy se habla del tema Boca y todos se horrorizan por la posibilidad de que no siga en la Liga. ¿Cómo querés que sigan? Si Viatri o alguno de los chicos que aparecieron en los últimos tiempos no sé si llegan a cobrar diez mil pesos por mes y llenan La Bombonera. Nosotros tenemos jugadores que cuestan el doble, no los podemos vender y, salvo los clásicos, en el resto de los partidos salimos hechos o tenemos que poner plata.
¿Por qué en veinticinco años de Liga nunca se habló en serio de reformular el régimen de pases para que los clubes sean dueños de sus jugadores?
Lamentablemente creo que nunca tuvimos en la AdC una dirigencia fuerte que pueda marcar el rumbo. Está bien que la representación en ese organismo no siempre la asumen los verdaderos referentes internos de los clubes. Hace poco fuimos a votar la cuestión del contrato de televisión y parecía que teníamos que ir a decir que sí. A los cuatro que votamos que no, se nos murieron de risa.
¿Se estiró el contrato?
Sí, hasta el 2012. Dieron este año cuatro cuotas para resarcir a los clubes por lo anterior y aumentaron la cifra actual (alrededor de 350.000) a quinientos mil pesos por club por temporada. A partir de la próxima Liga, se fijó que ese piso aumente según los aumentos del cable. Pero ése no es el tema. Cuando comenzó la televisación, los clubes cubrían el 80% de su presupuesto con lo que le tocaba por el contrato de televisión. Hoy sólo pagamos un par de jugadores o a un jugador y los viajes. A mí no me gusta hablar de cifras, pero hoy el presupuesto de un equipo normal no es menor a los tres millones de pesos. Tiramos un poquito más cada año y siempre estamos peor. Este año lo arrancamos con déficit y lo mismo ocurrirá el próximo. ¿Cuánto más se puede aguantar a este ritmo?
¿Qué es lo que más desgasta? ¿Las peleas con el Coprosede, los valores del mercado, que el público le esté dando la espalda?
A la gente no la podemos criticar. Después de jugar ocho partidos seguidos afuera de Mar del Plata, nos pegó un poco que haya ido la cantidad de siempre al cotejo ante Regatas Corrientes. Hicimos un equipo con el que, hasta hace poco, todos estaban contentos y no se reflejó en boletería. Hace un par de años trajimos a Huevo, otra vez a Sepo y sólo vendimos un 10% más de abonos. Pero creo que, en definitiva, todo pasa por una cuestión económica. De todos modos, ése no el principal problema. Lo más desgastante es conseguir los recursos. Año a año las entradas fijas (recaudaciones y televisión) ocupan un porcentaje menor de todo lo que hay que juntar. Además, los sponsors arriman la mayor cantidad de dinero en el verano y en los primeros meses, a la hora de armar el equipo, estamos «menos diez». ¿A quién convencés de adelantar el dinero? Y tenemos que hacer punta para ir a la AdC y proponer cambios. De una vez por todas, hay que hacer algo serio. Puede haber cuatro equipos que no tengan problemas…
Los de la plata dulce…
Sí, pero a la Liga la hacemos doce equipos más. De todos modos, a algunos de los equipos de la plata dulce ya les adelantaron que no los apoyarán el próximo torneo. Pero aparecerán otros. Ese es el gran problema de esta competencia. Siempre aparece alguien con mucha plata que degenera el mercado. Todos los años te comés un 30 o un 40% más de cualquier contrato. Por eso, si no hay cambios, se nos hará muy difícil.
Ustedes, los integrantes de la Comisión de Liga, ¿están con ánimos de seguir?
Queremos seguir, pero en otras condiciones. Si no hay que luchar contra los molinos de viento, seguimos. En mi caso particular, si no tengo que asistir a 75 reuniones, viajar tres veces a La Plata y dos a Buenos Aires, está todo bien.
En definitiva, lo que quieren son reglas de juego más normales…
Sí, claro, no todo tiene que ser una batalla. A media hora del clásico en el que nosotros fuimos locales, el comisario Pérez me llamaba por teléfono y me decía que lo iba a suspender porque faltaban tres policías en una puerta. Cuando el partido empezó, yo ya de lo único que tenía ganas era de irme a mi casa.
Tienen otra cuestión espinosa que resolver. Y es la de la localía. El contrato con Once Unidos termina. ¿Qué va a pasar?
No creo que Once Unidos no quiera renovar el contrato. Hubo algunas dificultades cuando recién se alejó Morel de la presidencia. Pero de a poco el nuevo presidente valoró que el básquetbol es el mejor negocio que tiene su club. Porque le genera un gran movimiento de gente y podría captarla en favor de Once Unidos. Nos encantaría tener nuestro estadio. De hecho, hay proyectos, pero no para lo inmediato. Por otro lado, es una utopía pensar que Peñarol y Quilmes podamos jugar juntos como local en el Polideportivo. Queda el famoso proyecto del techado del Velódromo para sumar otra alternativa. Pero no la veo clara. Hay que armar una reunión importante con Once Unidos y charlar sobre la extensión del contrato.
Entrevista: Sebastián Arana – Diario La Capital
Foto: Marcelo Demián Schleider www.infoliga.com.ar