Regatas Corrientes (2) – BB Estudiantes (0). Reclasificación Juego 3
Estadio: José Jorge Contte. Hora: 21.30.
Árbitros: Fernando Sampietro y Sergio Tarifeño.

El equipo del parque Mitre lo tiene contra las cuerdas a Estudiantes, luego de ganarle los dos primeros juegos en Bahía Blanca. Ahora tiene tres chances de pasar a cuartos de finales, dos de ellas como local.

El ejemplo cercano fue, la temporada pasada, cuando Sionista le “robó” los dos primeros juegos a Obras en Capital Federal y luego resignó la posibilidad de meterse en cuartos de final de la Liga Nacional de Básquetbol en un quinto partido. Sin embargo, un equipo con la experiencia de Regatas, no debería desperdiciar la chance de volver 2-0 de Bahía y más bien tiene que fijarse como meta “barrer” la serie reclasificatoria ante Estudiantes para meterse entre los ocho primeros de la competencia y así esperar algo más descansado el próximo cruce (de pasar, ¿contra Atenas?).

Cual boxeador tiene dominado el combate y con su oponente debatiéndose entre las cuerdas, así parece estar Regatas ante Estudiantes, al que nada más tiene que asestar el golpe de “nocaut”. Pero esto debería llegar sin darle resquicios para que pueda volver a tomar aire y recuperar la confianza.
Por juego, por plantel, por chapa, estaba claro que Regatas figura por encima de Estudiantes. Y en play offs, donde se templa el carácter, el equipo que ahora dirige Pablo D’Angelo salió decidido a mostrar su cara más brava.

Tozudo Regatas, no le importó que su irregularidad durante la etapa regular le quitara crédito respecto a otros candidatos, y se llevó el primer juego porque siempre confió en sus recursos genuinos. Aún cuando Estudiantes le había sacado 12 puntos de ventaja (62-50 en el tercer cuarto) y los árbitros parecían favorecerlo. Pero Regatas respondió con aplomo, entereza, transmitiendo una seguridad inquebrantable y que, al cabo de dos tiempos suplementarios, le dio la mejor recompensa: 107-97 para revertir la ventaja de localía.

Entonces afloraron las dudas del lado de Estudiantes, que salió con furia a jugar el segundo cotejo; pero otra vez se topó con una versión sólida de Regatas, que de la mano de un magistral Montecchia, supo llevar el desarrollo al terreno que más le convenía. La presión fue consumiendo a Estudiantes, que se empezó a sentir impotente cuando -en el segundo tiempo sobre todo- no encontró la manera de evitar la hemorragia que le producía el pick and roll del “Puma” con Kammerichs o Tintorelli, o las triangulaciones con ambos.

Y entonces la imagen de Regatas se agigantó, al punto que los aplausos del público bahiense para el equipo “albo” en la despedida eran también dirigidos en parte para el visitante, que hizo pata ancha en el Osvaldo Casanova. Ahora tiene la posibilidad de liquidar rápido un pleito que pintaba complicado en la previa porque enfrente estaba uno de los equipos revelación de la temporada.

Informe: Diario Época