Es nuestra intención dejar en claro la postura de la Asociación de Jugadores de Básquetbol ante modificaciones que, virtualmente, sufriría el torneo para la temporada 2014/2015. Claro está son trascendidos y no hay palabra oficial, pero no queremos dejar pasar el tiempo para opinar.
Desde distintos sectores nos ha llegado la idea de algunos dirigentes de establecer un número de contratos NO GARANTIDOS entre las fichas de nacionales mayores. Si esto ocurriera, desde ya nos oponemos firmemente. Los jugadores de básquet, son trabajadores por tiempo determinado (10 meses), es una característica que la justicia del trabajo ya ha receptado. Quitarle estabilidad laboral al jugador merece nuestro más enérgico rechazo. El jugador, además de no poder contar con una seguridad económica, no podría proyectar un año de trabajo en una ciudad con todo lo que eso trae aparejado para él y su familia.
Cabe preguntarse (de ser cierta esta reforma), si los clubes aceptarían contratos en los que un jugador pueda migrar a otro club, cuando le fuere conveniente por el motivo que fuere. Es decir las cosas más justas. Si no hay estabilidad laboral para el jugador, tampoco deberían estar seguros los clubes de que los jugadores estarán todo el año en su institución.
Otro tópico, supuestamente abordado en estas reuniones, es el recambio de jugadores extranjeros por jugadores nacionales. ¿Cuál sería el beneficio? ¿Por qué atentar contra el trabajo de los jugadores argentinos que son los que históricamente han alimentado a nuestra competencia? No tenemos respuesta a estas preguntas.
Vemos que hay críticas sobre el valor de los contratos de los jugadores y que se están pensando medidas para reducirlos. Son los mismos dirigentes los que saben con qué presupuestos cuentan en sus clubes y deberían ser ellos los que establezcan cuál es el monto disponible para contratar jugadores y cuánto pueden pagar por cada uno. Si la sensatez y la coherencia le ganaran a la pasión a la hora de armar el plantel, no se necesitaría la implementación de medidas cuestionables como estas que marcamos.
Pedimos disculpas si los rumores son falsos o erróneos. Es más, ojalá dirigentes de este grupo nos desmientan públicamente, en este caso preferimos estar equivocados, porque esa sería una buena señal para nuestros representados.
La Liga Nacional discutió y trabajó muchos años para lograr una reglamentación ejemplar (que en muchos casos es destacada por protagonistas de otros deportes), para que se piense en destruirla en una temporada. Los Reglamentos que hoy nos rigen, fueron votados por estos mismos dirigentes que actualmente piden cambios sustanciales y perjudiciales para la competencia.
Si los clubes pretenden generar divisas, no está mal, es perfecto y necesario, pero eso no puede traer aparejada la inestabilidad y desprotección de los jugadores, que son los protagonistas principales en esta película.
Finalmente, queremos remarcar que los Jugadores, a través de su Asociación, estamos dispuestos a participar de la mesa de debate para sumar ideas y propuestas con el único fin de crecimiento y bienestar para nuestra Liga Nacional. Creemos que el momento es ahora.
Informe: Asociación de Jugadores de Básquetbol