Hernández: «Será una final mediática»

Sergio Hernández y el carácter de este Peñarol finalista de la Liga. El entrenador sostuvo que las dificultades templaron el ánimo de su equipo. Y que se viene una final «muy mediática» frente a Atenas de Córdoba. Tan feliz como sereno Sergio Hernández, el entrenador de Peñarol, encaró la charla con los periodistas marplatenses posterior […]


Sergio Hernández y el carácter de este Peñarol finalista de la Liga. El entrenador sostuvo que las dificultades templaron el ánimo de su equipo. Y que se viene una final «muy mediática» frente a Atenas de Córdoba.

Tan feliz como sereno Sergio Hernández, el entrenador de Peñarol, encaró la charla con los periodistas marplatenses posterior al triunfo que metió a su equipo otra vez en la final de la Liga Nacional de Básquetbol. El bahiense desgranó tácticamente el cuarto juego frente a Libertad y se animó a trazar una pintura previa a la próxima final frente a Atenas. Pero resaltó tal vez la virtud más importante que el equipo marplatense tuvo a lo largo de todo el año: el carácter para jugar lejos de casa. «El equipo jugó con un carácter y una unión que es digna de admirar», dijo para luego sentenciar: «Muchas veces nuestros mejores partidos vinieron después de una derrota».

¿Cómo influyó finalmente la imprevista baja de Pinnock en este cuarto partido?
Yo creo que fuimos inteligentes en saber que sin la presencia de un alero determinante como Pinnock, más allá de que no había estado en su nivel en la serie, y con la ausencia de Pelussi, Libertad seguía siendo un equipo con carácter, defensivo, intenso, disciplinado, pero con poco volumen ofensivo. No era natural para Libertad anotar puntos, tenía que trabajarlos mucho. Ya en el cuarto partido no podíamos sufrir sorpresas tácticas ofensivas. Ajustamos las defensas de las pantallas bajas y altas que nos habían traído problemas en el tercer juego y el final de flex con pick and roll a Moldú, que nos había hecho mucho daño. Y mantuvimos la congestión en la pintura con Batista. El tema defensivo fue clave porque ofensivamente estuvimos bien, pero tampoco fuimos una lumbrera. Me parece que supimos desgastarlo a Libertad y lo tuvimos en treinta puntos hasta el minuto veinticinco o veintiséis de partido.

Está claro que Peñarol tuvo muchas dificultades, pero que hasta aquí ha sido el mejor de la temporada y hubiera ganado la fase regular sin aquel descuento de cuatro puntos…
Pero las piedras en el camino te forjan el carácter. Siempre que haya jugadores de carácter fuerte y nosotros los tenemos. Por eso nunca perdimos dos partidos seguidos en toda la Liga. Y muchas veces nuestros mejores partidos vinieron después de una derrota. Eso indica mucho orgullo, compromiso y que mejoramos mucho uno de nuestros problemas, que era el de la concentración. Como los psicólogos dicen, una cosa es el esfuerzo, que cualquier competidor lo tiene y otra es el sobre esfuerzo, el que te lleva a levantarte e intentar de nuevo después de caerte. Este equipo lo tiene. Pero, vamos a ser sinceros, en una liga tan larga, todos los equipos sufren situaciones adversas e intentan sortearlas. Nosotros lo hicimos, además, porque este plantel tiene mucha calidad.

¿Te animás a decir qué puede pasar en la final frente a Atenas?
Me parece que va a ser una final muy mediática. Se enfrentan dos equipos de dos ciudades muy importantes del país, con mucha historia, con muchos seguidores, nada menos que en el Polideportivo y en el Orfeo, los dos estadios que se disputaron organizar la final de la Copa Davis hasta el último momento. Atenas tiene a un entrenador y a un jugador medallas de oro en Atenas 2004. Y Peñarol al entrenador y al pivote de la última selección, la que ganó el bronce en Beijing. Jugadores con mucha historia como Diego Osella, del lado de Atenas, y Tato Rodríguez, de nuestro lado. También Juan Manuel Locatelli, que en el año que se va le toca enfrentar a Peñarol en una final. Todo muy atractivo. Los dos equipos queremos ganar. Pero ojalá que la final dé todo lo que promete porque a la Liga le vendría muy bien.

Cuando ganaste la Liga de las Américas, dijiste que tu sueño era ganar la Liga Nacional con Peñarol en el Polideportivo. Ahora estás donde querías aquella vez…
Siempre estuvo en mi cabeza. Ojalá podamos lograrlo. Todos sabemos de la locura, la pasión, la fidelidad que hay en Peñarol con el equipo. Es muy grande imaginarte el Polideportivo lleno festejando un título. Lo consiguieron una vez y no fue en Mar del Plata. Esperamos conseguirlo esta vez.

Volviendo a la final, ¿es conveniente para Atenas ir al Orfeo donde nunca jugó en la temporada?
Me remito a una frase que Néstor García dijo hace unos años. «A mí dejame llegar a la final. Después, si querés, juego los siete partidos en tu casa». El básquetbol es un deporte lógico. Generalmente, el mejor gana. Muchos dirán que en los demás deportes también. Por un lado, es cierto. Pero los demás deportes no tienen play-offs. Y los play-offs hacen más lógico todavía al básquetbol. A siete partidos, aumenta la lógica. El mejor en el juego va a ganar en la cancha que sea.

¿Qué opinás de lo bien que se comportó también en esta serie Facundo Campazzo?
Campazzo se prepara todos los días de su vida. Es un chico tremendamente competitivo, inteligente, disciplinado y un gran proyecto. Lo celebro porque él se lo merece.

Entrevista: Sebastián Arana – Diario La Capital