No acusaba recibo. A Atenas le pegaban en el piso y, en el primer tiempo, no se levantaba. Casi que no ofrecía resistencia. El Griego perdía, en algunos momentos del segundo cuarto, por una diferencia de 26 puntos contra el duro La Unión de Formosa.
Llegó a estar 15-41. Al final, se fueron al descanso 27-44 abajo pero, en el vestuario, hubo un lavado de cabeza
Y, lo que se encaminaba a una nueva derrota segura en el Polideportivo Cerutti, se transformó en el segundo cuarto, metiendo un parcial a favor de 27 a 11 y empezando el último parcial a uno abajo de diferencia de los formoseños que veía cómo se les complicaba el partido. En el último cuarto, Atenas salió decidido. Y convencido de que se podía. Y aparecieron con todo Bruno Lábaque, con Juan Manuel Rivero y Demián Filloy con varios triples seguidos.
Esa capacidad goleadora, más un importante ajuste en la defensa hicieron efectiva la reacción definitiva de los cordobeses que, tras el 76-74 de anoche ante La Unión, metieron el segundo triunfo consecutivo y ahora quedaron, en este año con tres victorias y una derrota como para ser más optimistas con el futuro del equipo en la Liga Nacional de basquet.