Un arranque muy parejo, con el local cargando su ofensiva en el poste bajo con Guaita y Clancy, sacando buenos réditos a tal punto de conseguir una luz de 5 puntos, 10-5. Sin embargo con el correr de los minutos, el “tricolor” se fue acomodando al juego, ajustó la defensa y desde la conducción y goleo de Luis Cequeira (7 puntos en ese parcial), más dos triples consecutivos de Ivory Clark, le permitieron revertir el marcador, adueñándose del primer chico por un doble, 19-21, la única preocupación para Ramella eran las dos faltas del base por la corta rotación producto de las bajas de Marín, Ortiz y Wolkowysky.
Tras mantener la brecha en los cuatro puntos, 23-27, Quilmes cometió un par de errores en las ofensivas, al tomar decisiones apresuradas, que como consecuencia fueron aprovechadas por el conjunto mensana, que pasó al frente por un triple, 34-31, cuando promediaba el parcial. En los minutos finales, la dinámica no cambio, porque a los marplatenses le costaba mucho cada ataque, permitiendo que el dueño de casa pudiera correr la cancha sacando una luz de ocho puntos, 40-32, haciendo que el entrenador marplatense pidiera minuto para acomodar a sus muchachos, que de cara al descanso largo pudo acortar la brecha a cinco puntos, 42-37.
El “cervecero” salió más concentrado en defensa haciendo que su rival tarde en anotar algo más de tres minutos, lo que le permitió meter un parcial de 0-4, para pasar al frente 42-43. A partir de allí y de la mano de un Baxley intratable en ataque (sumando 17 puntos en el parcial, para llegar a 25 en su cuenta personal), el juego se volvió intenso y entretenido, intercambiando aciertos y errores, en esa dinámica, fueron los de Gonzalo García quienes lograron una pequeña luz de cuatro puntos, 60-56, de cara al cuarto de la verdad. Dos cosas preocupaban a Ramella, una la dependencia en exceso de Walter Baxley en ataque y la otra la acumulación de faltas de sus perimetrales, ya que tenía a Cequeira y Baxley con tres y a Vildoza con cuatro a falta de diez minutos.
El último parcial fue disputado al límite desde lo físico, con ambos equipos proponiendo un juego “duro” y sucio, entrando los dos rápidamente en penalización por faltas, por el lado del conjunto patagónico, el apuntado para ser detenido era el escolta americano del “tricolor”, que seguía adueñándose de las ofensivas, cargando de faltas a sus oponentes, a tal punto que por esa vía saco del encuentro a Leonel Schattmann, pero los marplatenses perdían por faltas a Ivory Clark que no pudo en su duelo con Guaita, dueño del ataque con 11 puntos en su haber en ese parcial. A falta de un minuto, el juego con Gimnasia arriba por un triple, 81-78, Sergio Tarifeño cometió un error clave, porque Diego Romero, tras tomar un rebote ofensivo y marcar el doble, recibió una falta, el juez primero convalida la conversión y sanciona la infracción, pero después se arrepiente, anula los dos puntos y le da los dos lanzamientos al pivote, quien falla el primero y convierte el segundo. En la siguiente acción, el local sentenció la historia con Samuel Clancy desde la línea, quedándose con el triunfo por cinco puntos, 84-79 y los árbitros cometieron su último yerro cuando contra la chicharra no convalidaron un triple de Maximiliano Maciel desde la mitad de cancha.
No hay tiempos de lamentos para el conjunto marplatense, que deberá hacer borrón y cuenta nueva, ya que el próximo martes seguirá su gira esta vez visitando la “Bombonerita” para enfrentar a Boca.
Síntesis:
GECR Indalo (84): De Los Santos (17)(x), Scala (4), Aguerre (7), Guaita (19), Clancy (18)(FI); Orlietti (6), Schattmann (8)(x), Cavaco (5). DT: G. García.
Quilmes (79): Cequeira (13), Baxley (34), Maciel (7), Clark (6)(x), Gallizzi (2)(FI); Vildoza (2), Romero (15), Merchant (0), Provenzano (0). DT: L. Ramella.
Parciales: 19-21; 42-37; 60-56; 84-79.
Árbitros: S. Tarifeño – J. Dinamarca.
Estadio: Socios Fundadores (Comodoro Rivadavia)
Crónica: Alejandro Maldonado Casamajor @alemaldonadopd