El de anoche pudo ser tranquilamente un libreto de suspenso. Los nervios y la expectativa estuvieron a la orden del día en el cierre del encuentro. Atenas pudo liquidarlo pronto pero falló en su intento y le puso mucha adrenalina, esa misma que lo llevó a soltar un fuerte grito de victoria cuando el 71-65 fue una realidad y la séptima victoria estuvo en el bolsillo.
Con su manual de estilos bajo el brazo, Weber Bahía supo confundir a Atenas en el primer cuarto. Mariano Byró (8 puntos) hizo estragos cuando corrió: anotó e hizo jugar; igual que Trevor Gaskins (7). Ambos lideraron a la visita hasta el 25-18, aprovechando, además, que el Verde no se pasó bien el balón y cometió muchos errores.
En los segundos diez, los reservas de Gustavo Miravet dieron soluciones. Se destacó Matías Bortolín bajo los dos cristales (6 puntos, 3 rebotes y 1 tapa), con la colaboración de Demián Filloy y Juan Manuel Torres en la pintura. Pasó al frente por primera vez (35-33) restando 3’11 y terminó ganando el segmento 39-38 tras un recupero y corrida de Alexis Elsener luego de que Lucio Redivo le complicara la existencia con dos bomba seguidas.
Promediando el cuarto, el Griego pareció encontrarle la vuelta al juego sacando una máxima de 8 (49-41), pero nada fue más mentiroso que esa presunción. Los bahienses, con un parcial de 19-6 y un Redivo intratable (7) se adueñaron de las acciones y cerraron 60-55.
En el último segmento jugaron y se fajaron, en las mismas proporciones. Se combinó experiencia y juventud. Lábaque tomó las riendas en Atenas y Redivo en Weber. Pero fue Juan Manuel Torres el que se adueñó del juego. Ganó debajo de uno y otro aro, fue desequilibrante y guió al Verde con el 71-65 al séptimo triunfo consecutivo.