Regatas (C) (1) – Atenas (2); Quimsa (1) – Sionista (2) y Boca (2) – Libertad (1), jugarán el cuarto punto de la serie de cuartos de final. Lanús (0) – Peñarol (2) disputarán el tercer partido del playoff. Si esta noche ganan Peñarol, Atenas, Sionista y Boca quedarán definidas las dos semifinales.
 Regatas (C) (1) – Atenas (2)
|
Quimsa (1) – Sionista (2) |
|
| Boca (2) – Libertad (1)
|
Lanús (0) – Peñarol (2) |
Regatas (C) (1) – Atenas (2)
Estadio: José Contte. Hora: 21.30
Árbitros: Roberto Settembrini y Diego Rougier.
Con la moral muy en alto después de achicar la serie (1-2), tras dos derrotas consecutivas en Córdoba, Regatas Corrientes buscará mañana igualar la serie ante el último campeón de la Liga Nacional de Básquetbol.
De esta manera el equipo de Fabio Demti evitó ser barrido de la serie, aspecto que sólo se dio en la primera temporada “Fantasma” en la Liga Nacional (2004/05) en donde Conarpesa de Puerto Madryn se impuso 3 a 0, para seguir con vida.
“Lo primero era ganar y cambiar un poco la cabeza, fundamentalmente respecto del último partido en Córdoba. Ahora nos convencimos que le podemos ganar a Atenas y seguramente vamos a ir el viernes a buscar una nueva victoria para trasladar la serie a su casa”, dijo el entrenador santafesino respecto a la situación limite que le tocó vivir a su equipo el último miércoles en el parque Mitre.
Respecto al juego del miércoles, el entrenador Demti comentó que “jugamos un primer tiempo discreto y Atenas estuvo muy derecho con el aro. Estas cosas fueron motivo de análisis en el entretiempo, en el segundo tiempo volvimos a jugar bien y a dominar el partido”.
“En líneas generales –continúo Demti- me parece que estamos bien, sabemos como jugarle a Atenas y después el destino dirá. Nosotros ya ganamos, y no nos podemos seguir pensando en el partido que perdimos y tenemos que pensar en ganar el próximo, éste viernes, para ir al quinto allá. El básquet es así”.
Informe: Prensa Regatas
Quimsa (1) – Sionista (2)
Estadio: Ciudad. Hora: 22.00.
Árbitros: Sergio Tarifeño y Roberto Smith.
Quimsa demostró que puede. Sabe que defendiendo duro y con paciencia en ataque, puede doblegar nuevamente a Sionista, esta noche desde las 22 en el Ciudad, para establecer la igualdad en la serie de cuartos de final de la Liga Nacional de Básquetbol.
Sabe que con sacrificio, dureza mental, nervios de acero y mucha contracción defensiva puede animarse a soñar. Necesita la victoria para seguir ilusionando a su público.
Estar entre los cuatro mejores sería todo un mérito para este equipo, que fue protagonista durante toda la temporada de cada uno de los torneos que disputó. Es por ello que la victoria es una obligación, de lo contrario quedará la sensación de que se quedó con sabor a poco.
Lo que pasó, lo que viene
Amén de lo que uno espera siempre de Román González y Jonatan Treise en el aspecto ofensivo (quienes cumplieron y con creces), la “fusión” contó el miércoles con el invalorable aporte de Damián Tintorelli, Dionisio Gómez Camargo y Juan Pablo Gil (7 en el último cuarto), éstos dos últimos, jugadores que están regresando de sendas lesiones, para colaborar en el goleo y abrir así las opciones cuando de tirar al canasto se refiere. Debido a esto, Quimsa ya no fue tan previsible como en Paraná, por lo que de alguna manera sorprendió a Sionista.
El visitante, en tanto, jugó un gran partido, con “Chuckie” Robinson y el “Paragua” Martínez como estandartes y figuras, pero no le alcanzó.
Quimsa “maniató” a Luis Cequeira, un base explosivo que no marcó mayores diferencias con su extraordinaria velocidad de piernas; y también marcó bastante bien al “Chino” Zilli, otro que había sido un dolor de cabeza en Paraná. Quizás por ahí hayan pasado las claves del partido.
Entonces, el que se “salió del libreto” fue el paraguayo Martínez, con un asombroso 6/9 en triples, de los cuales 5 los marcó en el tercer cuarto y 3 de ellos de forma consecutiva. Habrá que ajustar esa marcación para hoy, no habrá que darle mayores espacios al eficiente escolta visitante. Para no sufrir tanto, Quimsa necesitará y mucho de Brown (1/4 en dobles, 1/5 en triples) y Muruaga (4/7 en libres, 2/4 en dobles, 1/4 en triples), dos tiradores que estuvieron “peleados‘”con el aro, para abrir un poco a la cerrada defensa visitante.
Si los tiros de afuera entran, la “fusión” podrá “pilotear” el partido con mayor tranquilidad; o bien le brindará a los internos mayor espacio para maniobrar, puesto que obligará al elenco paranaense a abrirse un poco más, a mirar más hacia el perímetro.
Donde no deberá conceder ni un centímetro de ventaja será en la defensa. Ahí no hay concesiones que valgan. Atrás hay que jugar a “cara de perro” si uno pretende llegar al domingo para definir la serie en Paraná.
Informe: Nuevo Diario web
Boca (2) – Libertad (1)
Estadio: Luis Conde. Hora: 21.00.
Árbitros: Juan Fernández y Osvaldo Bautista.
Boca es uno de los equipos que más honor le hace a esa palabra entre los que no están eliminados ni son candidatos firmes al título de la Liga. El sacrificio de los xeneizes impresiona y por el momento ha ganado la batalla mental de la serie, que puede poner a los de Pablo D’Angelo en semifinales esta misma noche. Eso significaría concretar un resultado claramente por encima de lo previsto y de un mérito enorme para todo el plantel del rosarino, que da ventajas de altura y de profundidad del plantel ante los Tigres. Eso, más el talento natural que fluye a raudales del experimentado equipo sunchalense hace que no se pueda considerar a Libertad por debajo de Boca en cuanto a las chances de victoria para el cuarto juego. Pero para eso deberán sumarle a esas capacidades una mentalidad de playoff que no han conseguido lucir con regularidad en los tres partidos previos.
Informe: Básquet Plus
Lanús (0) – Peñarol (2)
Estadio: Antonio Rotili. Hora: 21.30.
Árbitros: Alejandro Chiti y Jorge Chávez.
Peñarol, que lidera la serie por 2-0, visitará esta noche a Lanús, en el estadio «Antonio Rotili», en el tercer partido del play-off entre ambos por los cuartos de final de la Liga Nacional «A» de Básquetbol. Y si gana, avanzará a las semifinales del torneo.
Hasta aquí, todo ha sido a favor del «milrayitas», aunque por momentos el «granate» le complicó la existencia. Sin embargo, en el balance general de la serie hasta aquí, Peñarol ha sido claramente superior.
Sobre todo con el rigor que logró imponer su defensa, permitiendo solamente 60 y 61 puntos de su oponente en cada uno de los partidos jugados en el Polideportivo Panamericano.
Su juego ofensivo no alcanzó el vuelo característico, pero es cierto que el rival también hizo su parte, fue en cierto modo inteligente y le restó velocidad a las transiciones peñarolenses.
Con todo, y pese al digno papel que han desarrollado hasta aquí los dirigidos por Silvio Santander, Peñarol se alzó con los dos triunfos con autoridad y sin zozobras. Y por eso, está claro que algo debería cambiar el conjunto «granate», si bien para el segundo partido no se replegó durante tanto tiempo en defensa zonal.
Lo que parece más notorio es que Lanús deberá mejorar sí o sí su ataque para tener alguna posibilidad. Entonces, la performance defensiva de los marplatenses volverá a resultar clave en el desarrollo del juego.
Y es obvio que si la solidez atrás puede asemejarse a la que mostró en los dos primeros choques de la serie, estará muy cerca de ganar, sentenciar la historia y concretar su pase a las semifinales.
Porque de eso se trata el juego de hoy. De la posibilidad de pasar, sin más desgaste que el de un partido, hacia la instancia de los cuatro mejores de la Liga. La victoria representa el pasaporte a una nueva ronda. La derrota, la obligación de quedarse un par de días más en Buenos Aires y volver a jugar el domingo.
Claro que, al margen de la prudencia que siempre hay que tener en estos casos, en Peñarol no quieren pensar en quedarse hasta el domingo.
La idea, en lo posible, es liquidar la historia cuanto antes y regresar a Mar del Plata rápido y con la clasificación asegurada.
No sólo por el riesgo deportivo que puede representar darle nuevas esperanzas al rival, sino también porque jugar menos significa descansar más, y es una realidad incontrastable que el plantel de Peñarol -que ha jugado más partidos que ninguno- sin dudas lo necesita.
Hasta el momento, Martín Leiva ha dominado el juego interior y Kyle Lamonte, en una serie de bajos scores, se erige como el goleador, con 18,0 puntos de promedio. Lanús, indefectiblemente, necesita más producción de sus perimetrales. De todos ellos.
Informe: Diario La Capital
