Fue una noche accidentada, ya Montevideo sufrió varios cortes de luz que primero alargaron la disputa del choque del primer turno (Uniceub de Brasil venció a Obras Básket, 72-68). Por eso, Malvín y Quilmes comenzaron su juego a las 22.30, una hora y media después de lo pautado.
El equipo de Ramella, acompañado por un número interesante de hinchas, tuvo un buen primer cuarto, pero se fue diluyendo a medida que su rival fue creciendo en confianza, con un plantel sumamente extenso para la rotación. En el «Cervecero» volvió a ver acción Maxi Maciel tras varias semanas, y debutó el ala pivote Marcus Morgan.
Luego del retraso, Quilmes salió a jugar el partido con una gran concentración e intensidad defensiva, anulando a los perimetrales de Malvín y siendo generoso en ataque. Logrando correr la cancha por momentos, con Sansimoni cerebral y Ruiz activo, el «Cervecero» movió la bola y dañó a su rival. En un trámite ligero y al inicio parejo (4-5 al frente los marplatenses), Quilmes comenzó a marcar diferencias y con el tiro exterior como aliado: a 3m30s, parcial de 10-0 para su máxima diferencia con lanzamientos seguidos de Durley y Ruiz (4-15).
Pero Malvín logró recuperarse, y aprovechó cierto relajo marplatense en el tramo final del cuarto. El conjunto montevideano respondió con un parcial de 11-0 para empatar en 15. Sansimoni, con un triple, le dio la última ventaja al «Tricolor» (15-18). La mala: Tayavek Gallizzi sumó 3 faltas. Ramella lo dejó arriesgadamente en cancha cuando había llegado a la segunda en la mitad de la parcial.
En los primeros cuatro minutos reinó la paridad y Diego Romero igualó en 22. Luego, Maciel con un triple empardó en 27, a falta de 3m26s. Desde entonces, el cierre fue mejor para Malvín, de la mano de Newsome. La intensidad defensiva de Quilmes le jugaba una mala pasada en las faltas. Romero y Morgan también llegaron a las 3 infracciones. El elenco uruguayo plasmó un parcial de 8-0 para estirar el marcador (36-27, la máxima). Quilmes pudo achicar el margen con Morgan y Durley, que aprovechó una pérdida local. Se fueron al descanso 36-31.
Sin embargo ya el «Tricolor» no pudo sostener el ritmo, acaso por cansancio, o por frustración. En una muy mala noche del empecinado Walter Baxley, la ofensiva chocó contra un muro uruguayo. Malvín se quedó con el cuarto 24 a 8. Un quiebra absoluto del juego. Del 45-36 en casi tres minutos, el elenco de López estampó un parcial 14-1, coronado con un triple de Mazzarino, faltando 2 minutos para el cierre del cuarto (59-37).
El último pasaje estuvo de más. Malvín mantuvo diferencias, y no aflojó su performance. Quilmes, frustrado por completo, se dedicó a pensar ya en el próximo juego ante Obras, este miércoles a las 18.45, en duelo de perdedores y que estarán obligados a ganar para seguir en carrera.
Malvín (75): Nicolás Mazzarino 12, Gustavo Bavosi 6, Kennedy Winston 7, Mathías Calfani 3 y Samuel Hoskin 16 (FI); Reque Newsome 9, Torin Francis 3, Fernando Martínez 10, Marcel Souberbielle 5, Juan Santiso 2, Ignacio Franzosi 0, F. Pomoli 2. DT: Pablo López.
Quilmes (59): Bruno Sansimoni 8, Walter Baxley 5, Enzo Ruiz 8, Jonathan Durley 12 y Tayavek Gallizzi 7 (FI); Maximiliano Maciel 11, Fernando Calvi 0, Diego Romero 7, Marcus Morgan 2, Eduardo Spalla 0. DT: Leandro Ramella.
Parciales: 15-18, 36-31 (21-13), 60-39 (24-8) y 15-20.
Árbitros: Roberto Vázquez, Roberto Oliveros y Krishan Domínguez.
Estadio: «Palacio Peñarol», de Montevideo.
Crónica: 0223.com.ar
