Bahía comenzó con fuerzas sobre el rival, anotando un parcial de 8-0 en 3min. jugados y marcando el ritmo de juego. El equipo de la ciudad tuvo una buena defensa de equipo, que le permitió controlar, y sumó con buenos tiros externos para marcar la ventaja inicial. De esa diferencia, los de Ginóbili pudieron soltar y plasmar el juego con facilidades. Aunque un buen cierre de la visita achicó la distancia (19-15).
Bahía volvió a escapar en el arranque del 2C, manteniendo el ritmo que había demostrado en el 1C. Pero la intensidad fue disminuyendo con el paso de los minutos y la visita logró recortar la distancia, emparejando el juego. Sin embargo, Bahía volvió a salir al frente, gracias a buenos pasajes de Redivo y gran potencia colectiva, derrotando a Peñarol 41 a 32 en el entretiempo.
Y Weber Bahía no se desprendió de esa diferencia en la vuelta al parquet. Porque pudo desplegar su juego y anotar con espacios. Además, supo superar la presión del rival para estirar la ventaja. El buen momento del equipo quedó inmortalizado en una gran volcada de Máximo Fjellerup, cuando el quinteto corrió la cancha luego del recupero y ganó, fácil, espacios ofensivos. Jugando de igual a igual, Bahía dominó y se mantuvo (60-52).
En el último cuarto Weber Bahía manejó los tiempos para mantenerse. Rotó su plantel y buscó soluciones para romper la presión. A partir de ahí, buscó su gol, además del equilibrio defensivo. Bahía nunca perdió la concentración, ni el foco del encuentro, manejando los hilos de principio a fin y capitalizando la victoria por 78 a 70
Crónica: Prensa Bahía Basket