El jueves pasado en tierras colombianas, una infortunada jugada, donde actuó un papel protagónico las goteras, le generó un duro revés a Juan Pablo Cantero. Durante el choque ante el equipo venezolano Espartanos, correspondiente a la Liga Sudamericana, el base sufrió la grave lesión de fractura del maleolo peroneo y rotura parcial de los ligamentos laterales internos que unen la tibia y el astrágalo, de la pierna derecha. La recuperación demandará aproximadamente cuatro meses.
A raíz de esta circunstancia el jugador fue sometido a una intervención quirúrgica, que se desarrolló en el Sanatorio Dupuytren de Capital Federal, y que estuvo a cargo del doctor Diego Yearson, un especialista en la materia. La operación culminó alrededor de las 21 horas de ayer y se trató de una reducción y osteosíntesis de peroné y reparación de ligamentos laterales internos. Esta mañana recibió el alta y ya se encuentra en Sunchales.
El médico del plantel de Libertad, Eduardo Grosso, le explicó, detalladamente y con tonalidad didáctica, a LNB.com.ar las especificaciones de la operación: “Se le colocó una osteosíntesis, que es una placa con tornillos en el peroné, además se le reparó los ligamentos con unas pequeñas prótesis, que se suturan cuando los ligamentos están desgarrados. Es una operación en dos tiempos, primero de un lado y después del otro, en las dos ha funcionado perfectamente bien”.
LNB.com.ar entabló contacto con Juan Pablo Cantero, quien amablemente accedió al diálogo, mientras recién arribaba a Sunchales. El base emanaba un semblante de tranquilidad y fortaleza anímica, así como capacidad discursiva para expresar sus sensaciones en este momento complejo. El armador empezó contando que “no lo esperaba, porque estaba my bien físicamente, pero las condiciones de la cancha ayudaron para que me pase esta lesión en este momento. Lo malo es que estaba muy bien tanto en lo físico como en lo psicológico, entonces esto fue una cuestión ajena a mi estado. Ahora a pelearla otra vez, estar más tranquilo que nunca e intentar volver mejor que antes. Eso es un balde agua fría, que reitero está fuera del contexto de todo lo que me venía pasando, estoy tranquilo y sereno y espero pasar este momento”.
El ex Atenas describió el movimiento que derivó en la lesión: “En un momento del segundo cuarto se interrumpió el partido por la lluvia, luego se volvió a jugar, la cancha estaba muy húmeda, también el tema del calor generaba que se empeorara el parquet. La cuestión que en una penetración frené en un tiempo, mi pierna derecha siguió, mi pie chocó contra otro pie de un adversario y eso provocó la fractura”.
Cantero apeló a la reflexión y el análisis originado de esta situación adversa que le toca vivir. El oriundo de Paraná compartió un pensamiento interesante al sostener que “uno por ahí se enoja con el tema de las canchas, pero termina jugando igual, lo cual es un error inconsciente que cometemos jugadores, técnicos y dirigentes. Hoy con mucha rabia me pasa de pensar y saber que una vez recuperado, si me toca una cancha en mal estado va a generar que me quede afuera de un partido. Hasta que no pasa esto uno no toma conciencia de lo peligroso que puede ser. Los jugadores inconcientemente seguimos jugando por las ganas, por no arruinar el espectáculo y nos vence el deseo en lugar de razonar. Hoy me pasa a mi en el tobillo, pero es probable que suceda en rodillas u otras lesiones más graves”.
Informe: LNB.com.ar
