Cuando un deportista de elite tiene un gesto como el que contaremos, su figura se enaltece aún más. Ésta es la historia de un ícono del básquetbol argentino y mundial cumpliéndole el sueño a un juvenil que está dando sus primeros pasos, Patricio Garino.
Si un pibe juega al fútbol, seguramente su gran deseo es conocer a Diego Armando Maradona.Lo mismo sucede con el rugby y Agustín Pichot; y con los distintos deportes que se practican en nuestro país. Toda disciplina deportiva tiene sus referentes, sus espejos, que son la figura a seguir por miles de chicos argentinos.
El inmenso crecimiento que ha vivido el básquet argentino en los últimos diez años hace que una infinidad de juveniles que practican nuestro querido deporte, tengan el deseo ferviente de conocer en persona a aquellos jugadores que han dejado a la bandera Argentina en lo más alto.
Cuando no hace tanto tiempo atrás veíamos en la Liga más importante del mundo, la NBA, a Michael Jordan con Chicago Bulls o a Magic Johnson con Los Angeles Lakers, era utópico pensar en que un argentino pudiese jugar allí y ser gran protagonista hasta llegar a alcanzar un anillo en ese imponente show que es la competencia norteamericana.
Hoy, ese sueño es realidad. Y muchísimos pibes quieren un autógrafo, una foto o simplemente un saludo de estos verdaderos ídolos. Por eso, creemos atinado contar esta pequeña pero rica historia que involucra a nuestro astro, Emanuel Ginóbili, y a Patricio Garino, un juvenil del Seleccionado Argentino que actualmente está desempeñándose en la Universidad de Montverde, Estados Unidos.
Esta es la primera parte de la historia, la semana que viene te contamos cómo continúa.
“En junio del año pasado tuve la oportunidad de integrar la Selección Nacional U18 para jugar el Pre-mundial en San Antonio. Allí, junto a mis compañeros, tuvimos un pequeño contacto con Manu. Salimos a comer, recorrimos el estadio de los Spurs y cuando se enteró que me venía a vivir a Orlando a estudiar y jugar al básquet, me dijo que me iba a invitar cuando jugaran contra los Orlando Magic”, comenzó relatando el juvenil marplatense a www.CABB.com.ar
La promesa ya estaba hecha. Sólo faltaba cumplirla y el escolta argentino no defraudó: “El 17 de diciembre, apenas un par de horas antes de salir de viaje con mi equipo a Hawaii a jugar un torneo internacional, me llegó un e-mail con la invitación de Manu para concurrir al juego de San Antonio en Orlando el 23 de diciembre”.
“Me sentí muy feliz que un profesional como él, con tantas obligaciones, se haya acordado de mí, un chico desconocido que sólo vio una vez, fue algo increíble”, agregó Pato.
Ese partido no fue favorable para los Spurs que cayeron frente a Orlando Magic por 123 a 101. Pero los 10 tantos que aportó Manu y la derrota texana simplemente fueron una anécdota para Garino, que veía como su sueño se hacía realidad. “Por fin llegó ese día. Llegué una hora antes del encuentro y pude disfrutar de un espectáculo increíble: la cantidad de gente, la magnitud del estadio y la presencia de Manu en la cancha, todo era maravilloso. Allí sentí que cumplía un sueño: estar cerca de un grande de la historia del básquet argentino”.
Como broche de oro, luego del cotejo llegó la charla mano a mano con el ídolo: “Al final del encuentro me hicieron pasar a un lugar de privilegio y ahí llegó Manu. Recibí su fuerte abrazo, charlamos un largo rato del juego, de su vida diaria, de los melli (Dante y Nicola, los hijos de Emanuel nacidos en mayo del año pasado) y hasta se hizo un tiempo para preguntarme por mi adaptación en Orlando. Luego nos sacamos fotos y nos deseamos suerte mutuamente. Sinceramente sentí que cumplí un sueño”.
Para terminar, el alto juvenil describió a la estrella de San Antonio: “Manu un grande dentro y fuera de la cancha, con toda su simpleza y sus dotes de buena gente”.
Durante el 2010, Patricio Garino integró la Selección U17 que terminó novena en el Mundial de Hamburgo. Del equipo argentino fue el jugador con mejor promedio de puntos (13,3), de rebotes (6,4) y de asistencias (2,9). Además, el marplatense había estado en el combinado U18, que jugó el FIBA–Américas en San Antonio y logró la clasificación al Mundial U19 de año que viene. En ese torneo, Garino acumuló 5,5 puntos y 2,8 rebotes.
Patricio Gioia – Prensa CABB