Otro hecho histórico se vuelve a repetir en el deporte salteño, Los Infernales superaron al Ciclón de Boedo 85-70 para seguir con la remontada pero sobre todo para consolidar la estructura en la máxima división.
El equipo de Gonzalo García llegó con una baja más que importante, el mejor jugador de La Liga, el santiagueño Gabriel Deck, tuvo que ausentarse tras un esguince en el partido que el Ciclón disputó frente a Boca Jrs. En ese sentido los de Boedo arrancaron sin una de sus armas letales. En el elenco local ingresó el mismo quinteto de los últimos juegos: Figueredo, Harris, Espinoza, Thornton y Zilli. Luego llegaron las rotaciones habituales en medio de un partidazo!
Con un triple de ventaja (39-36) para Los Infernales tras la primera mitad, los más de tres mil espectadores que coparon el Delmi vibraron al compas de los dirigidos por el Perro De Cecco. A diferencia de otras noches la efectividad en los lanzamientos de tres fue buena pero la defensa en cada bola fue lo que marcó el camino triunfal del equipo salteño.
En el Ciclón el ingreso del Penka Aguirre –volvió de una lesión-, la buena mano de Marcos Mata y la destreza de Darquavis Tucker hicieron que el líder de la competencia mantuvo la paridad en las acciones en esa primera mitad. Sin embargo, se acercaba un tercer capítulo donde los salteños fueron testigos de una verdadera paliza en contra del Ciclón.
Con un tercer cuarto impecable –ingresó el quinteto inicial- Los Infernales metieron un parcial de 15/0 a favor para ponerse a más de 20 puntos de diferencia. En medio del delirio de la gente y una sucesión de robos en manos del equipo local hubo varias acciones para poner en un cuadro pero la tremenda «gorra» –tapón- que puso Pablo Espinoza sobre la humanidad de Calfani, previo a una buena defensa de Zilli que lo dejó desacomodado, fue de antología y una de las jugadas de la noche. El telón del tercer período cerró 32-16 para los norteños.
Los últimos diez minutos el Penka Aguirre y compañía tomaron el control del encuentro y lo que había terminado con una diferencia de 19 puntos se redujo a 11 cuando promediaban más de seis minutos en el reloj. Los fantasmas del primer partido en Buenos Aires comenzaron a deambular por el pintoresco Estadio Delmi y rápidamente De Cecco solicitó minuto.
Bombazo de José Vildoza para poner a su equipo a ocho de distancia, en medio de la incertidumbre y el silencio apareció el capitán, una vez más, Diego Gerbaudo para meter una finta, dejar desairado al Penka Aguirre, hacer un paso atrás y quemar las redes desde los 6,75 metros. Varias almas volvieron a sus cuerpos y el público volvió a estallar. Quedaban solo algunos minutos para aguantar y volver a dejar una histórica huella en el deporte salteño, fue triunfo por 85-70.
Síntesis
Salta Basket (85): Diego Figueredo (9), Ricky Harris (17), Pablo Espinoza (16), Al Thornton (16) y Alejandro Zilli (4) FI. Diego Gerbaudo (13), Lucas Goldenberg (4), Gabriel Mikulas (6), Emilio Stucky (0), Nicolás Álvarez (-) y Iván Vicentin (-). DT: Ricardo De Cecco. AT: Leonardo Hiart y Ramiro Díaz Cuello.
San Lorenzo (70): Javier Ferrer (2), Darquavis Tucker (19), Marcos Mata (15), José Vildoza (7) y Mathias Calfani (3) FI. Nicolás Aguirre (19), Selem Safar (5), Leandro Cerminato (-), Cristian Cardo (-) y Lisandro Fernández (-). DT: Gonzalo García. Carlos Duró.
Parciales: 1C SB 18-16 SL, 2C 21-20 (39-36), 3C 32-16 (71-52) y 4C 14-18 (85-70)
Árbitros: Juan Fernández, Sergio Tarifeño y Héctor Wasinger
Estadio: Polideportivo Delmi (Salta)
Informe: Prensa Salta Basket