Siempre es importante recuperarse de un golpe, y la Selección Mayor masculina lo hizo sin mayores problemas. Después de la derrota del viernes frente a Uruguay, Argentina mejoró su imagen y logró una buena victoria frente a Paraguay por 83-61, sellando la clasificación para la segunda fase (récord de 3-1 en el Grupo A). Todo dentro de una noche especial en Olavarría, que vivió la emotiva ceremonia de retiro de la camiseta Nº13 de Andrés Nocioni. ¿Cuándo siguen las Eliminatorias? El 28 de junio, recibiendo a Panamá.
La visita aprovechó un comienzo un tanto errático de los locales, sorprendió y llegó a estar al frente 17-14 a los 7 minutos. Pero el conjunto de Hernández reaccionó, hilvanó un par de buenas defensas, dominó cerca del aro (Delía bajó 3 de los 6 rebotes ofensivos del equipo) y encontró buenas tareas de Laprovittola (6 y 4 asistencias) y, sobre todo, de Nico Brussino (8 puntos) para pasar al frente (25-17) tras un parcial de 11-0.
El seleccionado se mantuvo bien atrás, pero no terminó de soltarse ni mostró fluidez ofensiva (por momentos abusó del triple, anotando sólo uno de 11). Lucio Redivo (9 puntos) fue el más claro de la segunda unidad, y con su ofensiva instantánea resultó suficiente para sostener la ventaja al llegar al descanso largo: 40-33.
Al regresar, el ritmo se hizo bastante cortado, con muchas faltas de los dos lados. Sin embargo, Argentina se hizo dueño porque -fundamentalmente- encontró enormes respuestas desde el banco con Mainoldi (tres triples) y Saiz (7 puntos ubicando muy bien los espacios), vitales para tomar una máxima de 20 (66-46).
A esa altura, la resistencia de Paraguay ya estaba quebrada. Así, el equipo nacional remató la historia con algo más de Redivo (fue el goleador con 14 puntos) y algunas corridas de Balbi (7 y 3 pases gol) y Vaulet (9). Además, hubo tiempo para el debut oficial de Lautaro Berra, pivote de 20 años. Una noche completa y redonda para cerrar esta segunda ventana.
CABB