Un espectacular recibimiento tuvo Regatas Corrientes anoche. Los cientos de hinchas apostados desde los primeros pasos del plantel en la ciudad brindaron el colorido especial y el marco ideal para darle la bienvenida al “mejor plantel del continente”.

Y valió la pena las horas de espera. El fanático no veía la hora y no entendía de retrasos en los vuelos y desafió cualquier tormenta que pudiera sabrellevar en el aire “el equipo de la ciudad”.

Por eso Regatas llegó ayer con horas de demoras y nada le importó al “dale campeón/ dale campeón… “ que entonaron los seguidores con camisetas, gorros, banderas y vinchas.

El más aplaudido fue Federico Kammerichs, el primero en tocar suelo correntino. No pudo aguantarse más esta gira mexicana y desde el aeropuerto chaqueño virló todo protocolo y llegó antes que nadie.

“Este recibimiento es increíble, ahora no pensamos en el cansancio ni en lo que se viene. Esto es para toda la gente de Regatas que se lo merece”. No habí lugar para las palabras ni en el “mejor jugador del torneo” que confirmó su compromiso en el Juegos de las Estrellas que lo espera en los próximos días para coronar una jornada espectacular.

El micro de ERSA bajó del puente y se armó la fiesta. Allí lo esperaba un camión de Expreso Demonte y la caravana que nadie quería que termine.

Otros de los más festejados fue el escolta Javier Martínez. Recibió el “que de la mano/ del paraguayo / todos la vuelta vamos a dar”. Los hinchas reconocían a uno de los tres jugadores que repite el logro continental. Junto a Martínez, Ramzee Stanton y Roberto López suman al Liga Sudamerica en 2008.

La costanera se vistió de gala con el paso de los autos que no querían perder pisada al equipo campeón. Desde balcones, banderas y camisetas adornaban el paso de jugadores cansados de tanto cariño.

Regatas tuvo un periplo cansador en las últimas horas, con demoras en el aeropueto méxicano que lo llevó a perder el vuelo de cabotaje desde Buenos Aires.

Pero nada importó sumarle cinco horas más a este arribo. Nada desentonó el gran recimiento que tuvo, entre otros, el paranaense Eduardo Villares: “Este título no se logra todos los años, por eso ahora tenemos que festejar con los hinchas. Sabemos que esto es único y nada ni nadie nos quita la enorme alegría”.

Delegación completa arriba del “camión ganador”. Fabio Demti gritaba a la par de los juveniles y lo acompañan el “profe” Eduardo Pfleger, el utilero Rubén Alarcón y el encargado de prensa José Barreto.

Todos merecían este recibimiento que cerró con un estadio de los sueños repleto, con un escenario acorde al título que ahora descansará en las vitrinas del club.

Comenzó un martes y terminó el miércoles. Así de larga fue la “caravana de la gloria”.

Valió la pena tanta espera
La llegada de un equipo campeón no tiene hora. Es eventual. Pero la espera igual vale. El plantel que sufrió demoras, horas de retrasos en días de vuelo arribó a Corrientes y nada cambió en la alegría de una hinchada exaltada, que soportó los imprevistos para recibirlos de la mejor manera.

Miles de hinchas apotados cerca del puente interprovincial, donde comenzó el camino. Balcones de la costanera correntina que le daban el marco ideal a un camino plagado de gloria y festejos.

Así llegó Regatas, con los primeros minutos del miércoles pero que apostó al camión de bienvenida y al champagne que no dejó de salpicar a cada uno que buscaba tocar las copas en andas.

El estadio a pleno cerró una noche de festejos y todo valió la pena. Ahora a descansar.

Informe: Diario Época