Adquirió el derecho de ingresar a un círculo de exclusividad suprema merced a su patrimonio de talento y dedicación. La magnitud de la invitación a esa esfera sublime irradió el orgullo en su hogar, donde brotó la satisfacción por contar con un embajador de lujo.
El base Nicolás Laprovíttola, 1.87 metros y 21 años, atraviesa un momento especial en su carrera, dado que inició la primera concentración de la Preselección Nacional Mayor, que se prepara para intervenir en los Juegos Panamericanos de Guadalajara (México), que se desarrollará del 26 al 30 de octubre. El armador forma parte de los quince convocados por el entrenador Enrique Tolcachier, quienes trabajan desde el lunes 25 de julio, y hasta el lunes 8 de agosto, en la ciudad de Resistencia (Chaco).
Este nuevo peldaño en la vida deportiva de Laprovíttola vuelve a llenar de alegría a todos los componentes del Club Lanús. La relación con la institución nació hace cuatro años, cuando arribó en el transcurso de su adolescencia y donde creció y desarrolló todo su potencial. A lo largo de sus cuatro ciclos, que incluyeron una temporada en el TNA (2007/08) y tres en la Liga Nacional (08/09, 09/10 y 10/11), las actuaciones de Nicolás lograron que su apellido se propagara como el viento en el ambiente basquetbolístico. Tras surcar exitosamente distintos desafíos, ratificó con hechos las presunciones y ahora se le abrió un portal hacía una tierra privilegiada.
El crecimiento del base fue constante y a partir de su desparpajo y destreza conquistó la admiración de todo el público granate, lo cual se ve reflejado en la incesante pululación de camisetas con la dorsal 7 en cada noche de Liga en el microestadio Antonio Rotili. La evolución de Laprovíttola encontró el consenso en el universo del básquet en dos oportunidades concretas: la primera tras la temporada 2008/09 cuando quedó a sólo un voto de ser elegido como Revelación del torneo, así como en la última edición de la máxima categoría fue relegado apenas por solo un computo en el rubro de Jugador de Mayor Progreso.
Con el objetivo de profundizar en esta actualidad fructífera que transita el joven organizador de juego, el Departamento de Prensa de Lanús se comunicó con el protagonista, quien atendió desde su habitación en el Hotel Covadonga. Asimismo otros actores participaron del análisis de este momento brillante, como ser el técnico del combinado nacional Enrique Tolcachier, el entrenador de Lanús Silvio Santander, y el Presidente del Departamento de Básquet de Lanús Pablo Meilinger.
Tras compartir el almuerzo con sus compañeros, Nicolás levantó el teléfono de su dormitorio y acudió a su habitual humildad y tono calmoso para comunicar sus sensaciones. Laprovíttola confirmó la relevancia de la situación al comenzar el diálogo afirmando que “este es un paso muy importante en mi carrera, ya que estar en una selección mayor no tiene precio y no se puede comparar con nada”. Más allá de la alegría que lo apodera, el armador asume esta posibilidad con la misma confianza que emplea para zigzaguear rivales en los listones, ya que expresó sobre sus expectativas que “vine con la idea de quedar en el equipo definitivo, siempre respetando la calidad de jugadores que hay. Estoy dando todo para lograrlo”.
Laprovíttola se afronta a una dura competencia en su puesto, donde debe competir con jugadores experimentados como Junior Cequeira (26 años y participante del Mundial de Turquía) y Juan Pablo Figueroa (25 años y varias concentraciones con la Mayor), así como con el joven de 21 años Juan Manuel Fernández, quien se desempeña en el básquet Universitario de Estados Unidos. En relación a esta contienda Nicolás sostuvo que “somos todos grandes jugadores que vinimos para quedar. Nos conocemos bastante y sabemos cuales son las virtudes de cada uno. Es cierto que peleamos por un lugar, pero también compartimos las habitaciones, tiempos libres y seguimos siendo amigos. Ojala opten por llevar tres bases así tengo más chances, habrá que esperar lo que decida el entrenador”.
Lanús lo acobijo y le generó un clima ideal para su desarrollo, siempre apostando a sus condiciones y sin sobrecargarlo de presiones. Indudablemente la decisión de anclar en la institución bonaerense influyó en su formación. Laprovíttola reconoció la influencia de la entidad al sostener que “tengo que agradecerle mucho al club, ya que desde que llegué se me abrieron las puertas para las selecciones. Sinceramente le debo todo a Lanús”.
Bajo la órbita de Silvio Santander el armador disputó 104 cotejos con promedios muy productivos de 22.6 minutos, 7.5 puntos, 2.5 asistencias, 2 rebotes, 1 recupero, 53.4% en dobles y 38% en triples. Justamente el coach de Lanús aportó su visión calificada sobre esta coyuntura de Laprovíttola al aseverar que “considero que Nicolás se merece la convocatoria a la Preselección por su dedicación y esfuerzo. Estoy convencido que capitalizará la experiencia, así como para el club es muy importante que un jugador con tanta identificación forme parte de un proceso de selección. Para Lanús es un hecho significativo no sólo por lo que pueda recoger el basquetbolista, sino porque será observado como un espejo a seguir por los más de cuatrocientos chicos que juegan en la institución”.
El máximo dirigente del básquet granate, Pablo Meilinger, también aceptó la propuesta de compartir sus pensamientos y contó que “para el club es importante que un jugador que está hace cuatro años con nosotros sea parte de una Preselección de Mayores. Si bien es cierto que se inició en otro club, nuestros entrenadores lo potenciaron para llevarlo al lugar que hoy ocupa. Estamos orgullosos del momento que vive Nicolás y esto es un camino que se debe mostrar a los jugadores de las inferiores, dado que ratifica que con talento, esfuerzo y un club que los acompañe se puede llegar”.
Otro de los actores en esta historia es el técnico Enrique Tolcachier, quien amablemente aceptó la propuesta de charlar. El coach describió los fundamentos para la convocatoria de Laprovíttola al detallar que “Nicolás está dentro de los proyectos que venimos trabajando desde formativas. En algún momento le expresé que si continuaba trabajando duro y seguía creciendo como lo hizo en la Liga Nacional iba a tener posibilidades en la Mayor. Así que su llamado se debe a su dedicación y presente en la máxima categoría”. El entrenador cordobés aprovechó para destacar las principales virtudes del jugador y retrató con minuciosidad que “es un base con mucho talento, con varias características muy importantes para la posición como visión de cancha, inteligencia táctica para jugar el balón donde hay que jugarlo. Además cuenta con un equilibrio sobresaliente entre poder de gol y solidaridad”.
Por último Tolcachier revalidó la importancia de Lanús al manifestar que “es una institución que está trabajando muy bien, con un peso importante en la Liga Nacional. Es un club ordenado y prolijo que apuesta al desarrollo de los jóvenes, por lo cual ya hemos tenido algunos convocados a las distintas selecciones. Por eso les diría a los chicos que sientan el estímulo, que gracias al trabajo y pasión pueden tener una chance de integrar una selección, y que escuchen a sus entrenadores que le van a dar los elementos para seguir creciendo”.
Informe: Juan Martinich – Prensa Lanús