Lanús puso primera al iniciar la etapa de pretemporada, que tiene como objetivo la óptima preparación para la venidera Liga Nacional 2011/12. El elenco de Silvio Santander trabajó en las instalaciones de la institución y en su primera jornada, de doble turno, contó con la intervención de cinco jugadores mayores y varios juveniles. El arribo de los extranjeros Jamaal Levy y Terrel Taylor se producirá el 20 de agosto, mientras que Nicolás Laprovíttola se encuentra en la concentración de la Preselección Nacional Mayor y se sumará el martes 9.
Con el gélido clima como condicionante la labor comenzó a las 10 de la mañana en el microestadio Antonio Rotili, donde el grupo se reunió para arrancar con una charla y luego dirigirse al gimnasio para realizar una sesión de pesas, después se llevó a cabo una rutina de lanzamientos para culminar con trabajos regenerativos, a cargo del nuevo preparador físico Gerardo Di Paolo. A la tarde el plantel se juntó a las 19 horas para recibir la bienvenida de la dirigencia y desarrollar una práctica intensa netamente con ejercicios basquetbolísticos.
En esta jornada iniciática participaron los mayores Juan Pablo Cantero, Mariano Byró, Adrián Boccia, Diego Guaita y Facundo Giorgi, a quienes se le acoplaron los juveniles Sebastián Orresta, Germán Fernández, Matías Cuello, Ivan Antoniuk, Guido Mariani, Lautaro Padilla, Federico D’Alessandre, Mauro Zabala y Erik Budzich.
Tras finalizar la exigente fajina, el armador Juan Pablo Cantero, 28 años y 1.84 metros, vertió sus concepciones en relación a su primer entrenamiento en la institución bonaerense. El paranaense acudió a la sinceridad y capacidad discursiva para compartir sus pensamientos. “Las sensaciones de este arranque son buenísimas porque ya conozco a varios chicos y al entrenador. Además en una visita que hice hace unas semanas me llevé una gran impresión del club, en una reunión me hablaron de las perspectivas, posibilidades y la idea del proyecto y eso a uno como persona lo enriquece mucho y lo lleva a meterse bien en el proyecto e intentar llevar al equipo a los más alto posible”, disparó el organizador de juego .
Indudablemente este período de preparación se convierte en un proceso arduo, donde los jugadores se entregan a tareas intensas. En relación a la tipología de esta etapa Cantero comentó que “pasa en cualquier deporte que uno lo que espera es estar dentro de la cancha, que es lo que o motiva y divierte. Todas las pretemporadas son duras, donde se sufre más. No obstante, si uno se mentaliza en intentar mejorar un poquito más, con el objetivo de llegar a un objetivo, esa búsqueda logra que la pretemporada deje de aburrir y tomarla para perfeccionarse y estar a más del 100%”.
El básquet argentino ha evolucionado notoriamente, la persecución de la máxima calidad de trabajo es una constante. En lo que respecta al aspecto físico se impuso en los últimos años los planes de mantenimiento de los jugadores en la época de receso. Justamente el base entrerriano contó algunas diferencias que vivió en este parate de Liga Nacional: “A diferencia de todos los años tuve indicado por médico descansar profundamente en el receso, no hacer nada, ya que venía de cinco años donde sólo paré tres o cuatro días, lo cual generó después de varios estudios que el cuerpo necesitaba un descanso largo. Me tomé un mes de ni siquiera correr ni pesas, luego tres semanas antes de venir acá empecé a trotar e ir al gimnasio en Córdoba. Me lo tomé de diferente manera, intentando principalmente no solo descansar lo físico sino lo mental, ya que venia de un año duro. Me sirvió para cargar energías y para que el deporte me vuelva a gustar como amateur, con muchísimas ganas de entrenar”.
El elenco de Santander continuará toda la semana con entrenamientos en doble turno, con la mente focalizada en ir encontrando el mejor estado para disputar la competitiva Liga Nacional 2011/12.
Informe: Prensa Lanús