Argentina, con su «Generación Dorada», no tuvo piedad de Uruguay, que jugó sin Esteban Batista, recuperándose de una distensión muscular, y lo derrotó categóricamente por 77-50 en amistoso de preparación de cara al Preolímpico de Mar del Plata.
El seleccionado comandado por Julio Lamas fue muy superior y se quedó con el trofeo «100 años del Banco de Seguros del Estado».
Más allá de todo esto, fue una buena prueba para los celestes de cara a su debut el 31 de julio en el Preolímpico ante… Argentina.
El primer tiempo fue discreto.
De entrada abundaron las faltas y las fallas de cara a los aros. El juego se hacía cortado, sin claridad.
Argentina, que se llevó el primer cuarto 15-10, mejoró con el correr de los minutos y logró escaparse en el marcador merced a que comenzó a acertar a distancia.
Nicolás Borsellino ingresó bien y gracias a sus 6 unidades acercó a los uruguayos, pero los argentinos ajustaron las clavijas en defensa y volvieron a sacar una más que respetable diferencia: al final del primer tiempo ganaban 9 (32-23).
El problema de los de Gerardo Jauri era que carecían de suficientes vías para llegar al gol.
El tercer cuarto sentenció el encuentro: Argentina encontró su mejor juego, se sintió muy cómodo, se hizo fuerte en todos los sectores del campo y minimizó a los uruguayos, que, a pesar de dejar el alma en la cancha, nunca encontraron pudieron mostrarse sólidos.
El tercer cuarto se cerró con un lapidario 64-34.
El último cuarto fue apenas por cumplir: los de la vecina orilla siguieron demostrando su superioridad y el juego finalizó con un contundente 77-50.
Amén del resultado, esta fue una hermosa oportunidad para poder ver en acción a jugadores de la talla de Emanuel Ginóbili (8 puntos), Luis Scola (21), Carlos Delfino (14) y Andrés Nocioni (4), entre otros.
¿El máximo goleador? Scola, con 21 puntos. Gustavo Barrera y Mauricio Aguiar, con 10 unidades cada uno, los mejores celestes.
Crónica: Ovación Deportiva