Mauricio Santángelo cumplió el objetivo de mantener a Independiente de Neuquén en primera, tras una definición que empañó los festejos. El entrenador de Independiente hace su balance y habla de la polémica.

Para Independiente de Neuquén la Liga Nacional de básquet llegó a su fin hace solo tres días, cargados de desahogo y declaraciones cruzadas. Entre problemas lumínicos, denuncias y reclamos por el final caliente ante Estudiantes de Bahía Blanca del que opina el país, el Rojo mantuvo la categoría. Un objetivo que Mauricio Santángelo se planteó cuando comenzó la competencia el 5 de octubre y que se cumplió casi seis meses después.

El Boti se repuso a las críticas y cerró un proceso que inició hace cuatro años con el Rojo jugando la Liga B. Lo dejó en la A en la última fecha y tras cuatro minutos que generaron emoción y sospechas.

Con las explicaciones del presidente de la ADC Eduardo Bazzi, la defensa de Marcelo Richott (DT de Estudiantes) y la protesta de Belgrano de San Nicolás (que se siente perjudicado por cómo se dio la definición del descenso) sonando en los medios, Santángelo se tomó un recreo en un living cargado de objetos que lo vinculan a su pasión, hizo un balance y dio sus explicaciones sobre el final del que todos hablan.

¿Por qué te fuiste tan rápido, por qué el festejo fue de esa manera?
Ya hace mucho tiempo que lo vengo haciendo, el año pasado me decían lo mismo. Quería entrar rápido, esa es mi forma, justo con el Lea Lauro fuimos los dos primeros que entramos, como en el ascenso, y para estar conmigo mismo, para respirar un poco, para festejar internamente. También me dolió un poco que la gente grite o diga algunas cosas que para ellos pueden estar bien, pero si se la agarran conmigo tampoco le hace bien al básquet de Neuquén. La gente iba a seguir festejando, nosotros estábamos exhaustos por lo que fue el partido.

¿Qué balance hacés de la Liga?
Tanto a nosotros como a Estudiantes el fixture no nos favoreció en el inicio de la segunda fase. Tuvimos cuatro partidos de visitante y cuando te acostumbrás a perder es duro remontarlo, porque en casi toda la liga no tuvimos la pareja de extranjeros que queríamos, eso nos llevó a la irregularidad. Tuvimos muchos problemas para jugar. Una liga A no es fácil, era una experiencia nueva y con la mayoría de jugadores de una competencia inferior. Gracias a Dios nos adaptamos rápido. Con la llegada de Terrell Taylor nos pusimos bien, nos hicimos fuertes.

¿Cuál es el balance personal?
Es positivo, además de la chance de trabajar en mi ciudad, con mi gente y en mi club, que para mi es el mejor del mundo. La experiencia de dirigir en A la esperaba hace años, pero también seguir con un proceso de trabajo que comenzó hace cuatro años con mi llegada, para tratar de hacer que el equipo vuelva a primera. Nosotros teníamos que trabajar y para mi fue una experiencia fascinante, a las responsabilidades no hay que tenerles miedo ni esquivarlas, hay que vivirlas y disfrutarlas, y eso es lo que significa el básquet. Es más difícil hacerlo en Neuquén que en otro lado, primero porque soy neuquino y después porque no hay identidad. El día que la tengamos va a ser todo distinto. Yo lucho por eso y para que el básquet neuquino crezca.

¿En algún momento hubo problemas económicos?
Nuestro presupuesto era tres o cuatro veces más chico que otros equipos. Teníamos un plantel de presupuesto no muy grande, pero sí los kilómetros a recorrer. Costó porque el TNA es diminuto con respecto a la Liga Nacional, igualmente yo siempre estuve muy bien, tuve respaldo por parte de los dirigentes. Los primeros meses costó pero en enero ya casi todos estaban con sus contratos al día. Como en cualquier casa a nosotros también nos faltó algún peso. Creo que va a ser difícil que se vuelva a repetir que Independiente pueda jugar, pero ahí se va a necesitar el apoyo de todos los ámbitos. La zona necesita un nivel como el de Independiente. Esperemos que haya otros equipos que jueguen los torneos nacionales, nosotros estamos desarrollando el deporte, no le hacemos mal a nadie. Queremos que haya más chicos jugando al básquet y que practiquen la disciplina.

¿Hubieras hecho lo mismo que Marcelo Richotti, poner juveniles?
Yo a (Juan) Levrino lo puse en la final del TNA, y era juvenil, los de Estudiantes no eran juveniles. Paletta juega su segunda liga, Muruaga viene de Peñarol, Barrera ha jugado mucho en la liga, Scheines jugó hasta en River. Yo creo que lo que quisieron hacer fue sacarlos para ovacionarlos. Y nosotros no agrandamos el aro, la pelota entró, los triples de (Esteban) López, el gol y foul de Nicolás Romano, el doble de Lauro. Nosotros hicimos mérito, presionamos, ganamos los rebotes, algo que no nos salió antes, teníamos que luchar hasta el minuto final. Además Franco metió 10 puntos seguidos, López tiro dos simples y los erró. Que se especule con eso empaña a dos instituciones y al nombre de Richotti. Duele, pero tenemos que pensar que es algo que nos costó mucho, tuvimos muchos obstáculos pero ganamos partidos como el de Peñarol que era muy difícil y esos puntos fueron fundamentales para el final.

El presidente de la ADC dijo que Independiente no merece estar en la Liga. ¿Qué opinas?
Cada uno se tendrá que responsabilizar de lo que dice, tuvimos un problema similar con Ben Hur, ganábamos por 11 puntos, quedaban seis minutos y cuando se recompuso la luz, con el mismo comisionado del domingo, por error de alguien se jugaron dos minutos más. Independiente terminó perdiendo y nos jugó en contra. Ahora fue más complicado y nadie va a poder discutir lo que hicieron los muchachos. El que desconfía tendrá que defenderlo después. Yo estoy tranquilo, es uno de los partidos que nunca me voy a olvidar en mi vida. Siempre pensamos en no descender y si nos pasaba perdíamos tres años de trabajo. Por eso la felicidad fue enorme, cada uno disfruta a su manera.

¿Qué vas a hacer de acá en más?
No tengo nada decidido. La felicidad máxima era terminar bien, con el Rojo en la A otra vez. Primero habrá que ver si Independiente puede seguir jugando, ver si se consigue apoyo. Si yo no soy el entrenador no va a haber rencores, es el club que amo, del que soy hincha y dejaría todo por el club. Me voy a tomar un descanso, hay posibilidades de ir a dirigir a otro país de Sudamérica una liga corta o en Argentina. Yo sin básquet por cuatro meses no me veo. Voy a analizar las posibilidades y haré lo que sea más conveniente.

Se dijo

«Cuando volvió la luz se produjeron hechos que no coinciden con la transparencia de la Liga. A algunas instituciones les queda grande la Liga de los campeones olímpicos. No se puede dar margen a la suspicacia» (Eduardo Bazzi, presidente de la ADC, al diario Clarín).

«Aunque Belgrano reclame en la justicia el resultado no se cambia. El comisionado técnico no vio nada raro dentro de la cancha. Haremos la inspección al estadio por el corte de luz y podría caber una sanción de 5 mil pesos a Independiente» (E. Bazzi, a LU 5)

«Hay instituciones que no están a la altura de la competencia, en lo económico y en lo ético también. Independiente de Neuquén es uno de ellos» (Eduardo Bazzi, presidente de la ADC, al diario La Nación).

La Mañana de Neuquén
Foto: Marcelo D. Schleider www.infoliga.com.ar