Quimsa de Santiago del Estero derrotó a Regatas de Corrientes y quedó ante la gran oportunidad de llegar a las semifinales de la Liga Nacional. Los 35 puntos (18 de 19 desde la línea) de Julio Mázzaro, los 23 de Cleotis Brown, y el amor propio de todo el equipo, permitieron sacar adelante un partido “chivo”. Fue 100 a 83 con un hecho determinante: las expulsiones de Alejandro Montecchia y el técnico Silvio Santander en los “remeros”. El próximo juego tendrá que esperar una semana en el mismo escenario.
Quimsa 100 (2) – Regatas 83 (1) | Planilla Oficial
En el comienzo del juego la imprecisión se apoderó de ambos conjuntos. Marcas fuertes (Javier Martínez con Cleotis Brown y Ramzee Stanton sobre Julio Mázzaro) le impidieron a Quimsa prevalecer por sus vías de gol naturales. Allí apareció “BJ” Mc Farlan para asumir un protagonismo con tiros largos y en rompimiento (12-7 a 4m.). Con el pickandroll negado de Alejandro Montecchia para “Chuckie” Robinson y Roberto López, fue Damián Tintorelli el que estableció claras diferencias en la pintura viniendo desde la banca. Jonatan Treise ensució el traslado visitante y recuperó dos pelotas seguidas cobradas con gol. Fue 22 a 17.
En el segundo cuarto, despertó Julio Mázzaro con su primer triple tras dos balones regalados por los de Santander. De inmediato “Clee” Brown encestó en suspensión y aparecieron los primeros 10 puntos de ventaja (27-17 a 8m.). Tintorelli continuó lastimando y le sacó la tercera falta al “Colorado” Reinick. Una corrida de Stanton fue eclipsada por un bombazo de 7 metros ejecutado por Victor Cajal, de gran partido. El ingreso de Andrés Rodríguez liberó a Mázzaro que en los cruces recibió un par de asistencias de memoria del ala pívot. De nuevo Cajal de 6m.25. mantuvo la brecha, pero Tintorelli le robó la tercera falta también a Gabriel Mikulas tras convertir con bonificación. Final del primero tiempo, 43-35.
Tras el descanso largo se vió lo mejor de Regatas, que borró de su mente el desgaste de la Sudamericana. Una gran defensa, con doblajes de los hombres grandes, durmió el ataque local que se quedó sin ideas. Un triple de Stanton acercó a 5 puntos a los “remeros”, con 3m30s. Un doble de Reinick luego de tres ofensivas fallidas, rompieron una pronunciada sequía. En el cierre, Diego Cavaco apareció en escena desde el perímetro y dejó todo abierto (62-56).
En el último cuarto, apareció el “Bebe” López para hacerse dueño de todos los rebotes ofensivos y convertir en segundas opciones. El paraguayo Martínez fue víctima de infracción y con tres lanzamientos desde la línea puso 64 a 61. El aluvión “fantasma” se hacía presente en el Ciudad, pero una falta dudosa de Cavaco mandó a la línea a Brown que no desperdició ninguno de sus tres intentos (69-63) a 7m “Clee” continuó encendido y estiró a 10 puntos la diferencia. Lópéz siguió implacable y Mázzaro clavó un triplazo tras sortear tres cortinas. Con el marcador 76 a 67, y con 4m50s por jugar, Montecchia, en una actitud sorprendente, reclamó airadamente una falta que le costó la expulsión. También se fue a los vestuarios el DT Silvio Santader luego de protestar el fallo. 8 simples sobre 7 convertidos, entre Cajal y Mázzaro por estas circunstancias, frustaron definitivamente a Regatas.
Nada está dicho, son dos equipos que demostraron porqué llegaron hasta ésta instancia. Pero nada le quita a Quimsa el sueño de llegar a las semifinales por primera vez en la historia del baloncesto santiagueño.
Síntesis
Quimsa 100: Jonatan Treise 0, Julio Mázzaro 35, Cleotis Brown 23, William Mc Farlan 16, Gabriel Mikulas 8 (fi). Andrés Rodríguez 0, Alejandro Reinick 4, Víctor Hugo Cajal 10, Sebastián Castiñeira 2 y Phillip Lockett 0, Nicolás Zanni 2. DT: Fabio Demti.
Regatas Corrientes 83: Alejandro Montecchia 3, Enrique Javier Martínez 16, Roberto López 13, Ramzee Stanton 16 y Clarence Robinson 11 (fi). Agustín Carabajal 3, Diego Cávacco 3, Damián Tintoreli 13, Juan Manuel Rivero 5, Néstor Serantes 0. DT: Silvio Santander.
Parciales: 22-17; 21-18 (43-35); 19-21 (62-56); 38-27 (100-83).
Estadio: Ciudad (AA Quimsa).
Árbitros: Alejandro Ramallo y Marcelo Latorre.
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