Eran muchas las cosas que estaban en juego para Quilmes en su presentación de ayer. Primero porque había que salir de una racha negativa de cinco derrotas consecutivas, segundo porque había dos jugadores debutantes y era necesario que empezaran al menos con un buen resultado, y por último porque el domingo se viene ni más ni menos que Peñarol. Y si bien estuvo cerca no pudo conseguir su objetivo, perdió ante Estudiantes de Bahía Blanca por 76 a 68 en un encuentro válido por la undécima fecha de la Liga Nacional de Básquetbol.
Luego de un par de imprecisiones en los primeros ataques, Quilmes trató de llevar adelante la idea previa del técnico Daniel Maffei. Esa apuesta tuvo dos puntos bien claros: molestar el panorama al traslado de Pepe Sánchez con la marca de un alto como Johnsen y poner la bola bien interna para el debutante Howell. Pero alternó buenas y malas en esos conceptos y el partido fue más desprolijo que bien jugado. Claro que la labor de Estudiantes no fue mucho mejor a la producción del local, sobre todo por la buena marca a Meyinsse, y el buen ingreso de Weigand en el juego le dio una pequeña diferencia a Quilmes al término del primer cuarto, 15-13.
Quilmes, con sus relevos en cancha, tuvo un buen inicio en el segundo parcial. Con un muy buen trabajo del juvenil Luca Vildoza en la base, la garra de Eseverri para defender y los puntos de Weigand se alejó 27-14. A esa altura a Estudiantes le costaba mucho poder penetrar la dura defensa local y ni siquiera contó con la efectividad a distancia de Espil. Pero el buen momento ya no fue tan fácil de mantener y de a poco la visita se fue acercando, el regreso de Meyinsse y el aprovechamiento de los errores de Quilmes lo dejaron cerca, 31-27. Para fortuna del local los libres le dieron un guiño en los segundos finales y se fue al descanso largo 35-27.
En el complemento el equipo de Maffei volvió al esquema de los primeros minutos del partido. Un grande con Pepe Sánchez y jugar lo más cerca posible del canasto rival, en este caso con más participación de Truscott. Y cuando esa alternativa no era viable, darle la chance a Hopson de buscar el uno contra uno. La respuesta de Estudiantes fue básicamente una, Meyinsse (12 puntos en el cuarto). El extranjero, siempre bien asistido por Sánchez, impuso su jerarquía y por momentos fue indetenible, así limó la diferencia ante un Quilmes que se quedó sin gol y no encontró respuestas en sus valores más importantes. Lo salvó un triple sobre la chicharra de Eseverri para entrar al cuarto final igualado en 52.
Los últimos diez minutos fueron muy intensos, con la desprolijidad lógica de dos equipos que buscaron la victoria en un encuentro siempre parejo. Ferreyra y Espil aportaron puntos valiosos para que todo siga en tablas en 59 a falta de 5. El desenlace fue incierto, a los aciertos de Hopson se sumaron los de Meyinsse hasta llegar al minuto final. Pero allí aparecieron dos triples seguidos de Estudiantes, y la jerarquía de Pepe Sánchez, que demolieron a Quilmes y lo dejaron sin posibilidad de reacción para sumar una nueva derrota, esta vez 76 a 68.
Crónica: Diario La Capital
Fotos: Demián Schleider www.infoliga.com.ar
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