El equipo de Sergio Hernández debía ganar para calmar un poco los ánimos de la gente. Se sabe que el lunes llegará Jason Osborne para debutar nada menos que el miércoles 14 en el clásico más importante del país. El reemplazado finalmente sería Erick Rodríguez que anoche aportó muy poco al juego. ¿Osborne traerá la solución y Peñarol encontrará el patrón de juego que pretende el entrenador? El tiempo lo dirá…
En la primera mitad apenas los minutos iniciales fueron de paridad. Los mejores pasajes de ambos equipos fueron cuando movieron el balón con paciencia. Boca comenzó a marcar diferencias cuando Cequeira aceleró el ritmo y metió un par de corridas que le permitieron sacar una ventaja de 17-11 a los 5 minutos.
A partir de ahí los Xeneizes se asentaron en su juego y provocaron que el local comenzara a desesperarse, además de aflojar en defensa. Así, con un Boca tranquilo y ordenado aun sin brillar y un Peñarol nervioso, la brecha fue aumentando a favor de la visita hasta que el tablero mostró 27-13.
El panorama se extendió al segundo parcial, porque Boca continuó apegado a su libreto, haciendo circular el balón y, sobre todo, seleccionando bien sus lanzamientos. Peñarol hizo todo lo contrario y acrecentó su mal momento con una baja eficacia en tiros de cancha. Por eso, casi sin hacer ruido, Boca se encontró con una diferencia máxima de 34-16 que se cerró en 40-26 antes del descanso largo.
En el tercer cuarto Boca no pudo volver a su rendimiento anterior (lo mejor lo conseguía con la velocidad de Cequeira), con Ale Diez sobre Gutiérrez, que prácticamente desapareció mientras el olavarriense lo tomó adentro y afuera. Pero el equipo capitalino nunca perdió la tranquilidad que le permitía manejar la ventaja a su favor. Por eso, aun ante un rival impreciso, Peñarol no podía descontar porque tampoco jugaba bien. Recién sobre el final del parcial, con la entrada de Picarelli, el local acertó algunas ofensivas y pudo descontar a un 54-47 que le hizo recuperar la ilusión.
En el último cuarto el Milrrayitas tuvo su pasaje de mejor juego de conjunto, con «Tato» Rodríguez suelto como escolta, más el aporte del esforzado Diez y del irregular Johnson. Así pudo acercarse 62-57 con 6 minutos por jugar. Pero hasta allí llegó lo del equipo marplatense, porque Boca respondió con un cierre casi sin errores. A partir de la seguridad de Cequeira y de la calidad de Gutiérrez se beneficiaron todos. Sobre todo Funes, que hizo un excelente aporte aprovechando también las ventajas defensivas que recibía. Por eso Boca llegó a la definición calmo y seguro, como durante todo el juego, para quedarse con una gran victoria que lo pone muy cerca del Super 8 Clarín.
Ale Diez, siempre cumple.
Román jugó poco, ¿habrá sido un castigo del técnico?
Manu lo sufrió desde la platea, sigue lesionado y no llega al clásico.
Leo Gutiérrez, la figura del visitante.
CARAS LARGAS…
Jasper Johnson, ¿se va o se queda?
Román bosteza en el banco…
«Tato» Rodríguez.
El clásico, a las 22.00
El superclásico entre Peñarol y Quilmes, pendiente de la 10ª fecha, se jugará el miércoles en el Polideportivo pero a las 22.00, y no a las 20.30, como estaba programado originalmente. Televisará para todo el país TyC Max.
Fuentes: lnb.com.ar | datos propios
Fotos: Marcelo D. Schleider www.infoliga.com.ar