El equipo de José Luis Pisani fue de menos a más -encontró la llave del partido en el tercer cuarto- y tuvo en el dúo conformado por Pepe Sánchez y Jerome Meyinsse la gran diferencia de la noche.

Pepe volvió de una fisura en una de sus costillas y se mostró a un nivel notable: anotó 12 puntos y entregó 11 asistencias, además de controlar los tiempos del juego en pasajes importantes.

«Hemos crecido mucho como equipo, tenemos variantes. Lo mejor que hacemos es poder repartir la pelota y encontrar soluciones desde diferentes vías de gol», dijo el armador bahiense al cierre del juego.

Meyinsse, en tanto, fue el máximo anotador del juego con 22 unidades, mientras que Damian Tintorelli y Bernard Robinson, con 15 cada uno, fueron los mejores de la visita.

Hasta el ingreso de Pepe Sánchez -entró en cancha con el resultado adverso 15-9- Weber Bahía Estudiantes y Quimsa estaban haciendo un partido deslucido, físico, poco vistoso para el público que llegó al Casanova pese al calor agobiante.

El tándem puertorriqueño conformado por Javier Mojica y Ricky Sánchez mantuvo en ese tramo al local a flote, pero sin dudas fue Tintorelli, con su fortaleza debajo de los tableros, el que marcó el rumbo del equipo de Carlos Romano.

«Fue un partido muy físico, pero con el trabajo de todos logramos sacarlo adelante. Me apoyo mucho en mis compañeros, que me ayudan a crecer. Estamos jugando cada día mejor», dijo Mojica al cierre del juego.

En el segundo cuarto, el dominio de Tintorelli, combinado con lanzamientos certeros de larga distancia, empujó a Quimsa. Pero la reacción llegaría por intermedio de tiros externos de Juan Espil, potencia de Meyinsse debajo de los tableros y un triple notable en el cierre del primer tiempo de Pepe Sánchez -desde unos diez metros- que le permitió a Bahía cerrar a uno la primera mitad (43-44).

Todo cambió en la segunda mitad. Weber Bahía salió intenso del vestuario y con un parcial de 17-6 marcó la diferencia crucial en el partido. Quimsa, enredado en las discusiones arbitrales, no supo como defender el pick and roll de Pepe con Meyinsse y los lanzamientos que surgían de los pases de adentro hacia afuera.

La visita sólo contó en ese tramo con algunas arremetidas de Jesse Pellot-Rosa, pero Bahía defendía duro, corría y estaba con una efectividad tan alta como las nubes. Pepe continuó manejando los hilos del equipo y permitió que Bahía se escape 71-60 en el cierre del tercer chico.

En el último tramo, la tónica del partido siguió siendo igual. La rotación de balón abría grietas en la defensa de Quimsa y un par de bombas a distancia de Juan Espil terminaron cerrando la historia a favor del local.

«Fue un juego difícil, muy disputado, pero la clave fue mejorar en la segunda mitad todo lo mal que habíamos hecho en la primera. Salimos muy livianos de arranque, pero crecimos en defensa y ahí estuvo la diferencia», completó Mojica.

El equipo de José Luis Pisani se prepara para recibir a Libertad el domingo, en otro partido que luce, a priori, muy complicado.

Crónica: Prensa WB Estudiantes