A partir de este resultado el elenco de Silvio Santander enarboló su tercera victoria consecutiva y llegó a los 21.5 puntos. En tanto, los santiagueños sumaron su novena caída en condición de visitante y ostentan 17.5 unidades, con un encuentro adeudado.

El ‘Granate’ edificó su imposición en una actuación colectiva convincente y sólida, que le permitió dominar el tablero durante toda la noche, así como contó con reacción anímica para frenar la embestida rival en el tramo final. En el plano individual se destacaron Mariano Byró con 15 puntos (2/4 en triples) y 3 robos y Nicolás Laprovíttola con 14 unidades y 3 asistencias. En la visita sobresalió el extranjero John De Groat con 27 puntos (2/2 en triples, 9/12 en dobles y 3/5 en libres) y 7 rebotes.

La historia comenzó al ritmo de Lanús, quien saltó al parquet enchufado y muy compenetrado, al punto tal que maniató a Olímpico y le clavó un arranque furibundo 10-0, a falta de 6:30 minutos. El visitante lucía ensimismado, sin claridad en ataque y con grietas en su defensa. De la mano de Levy (6) y Taylor (4) el local manejó los tiempos y se llevó el primer chico 19-10.

En el segundo capítulo se modificó la tesitura del juego, ya que los santiagueños apretaron las clavijas en su campo, comenzaron a implementar mayor intensidad y encontraron en los arrestos individuales de De Groat (6) y Romero (6) los códigos para achicar la brecha y empatar en 26-26, a falta de 4:30 minutos. En ese lapso el conjunto de Santander perdió la línea, se desdibujó y se hundió en una anemia ofensiva. No obstante, el Granate desarrolló una labor asesina en los últimos minutos del cuarto, donde estampó un pasaje 14-0, fundamentado en el contagio y corrimiento de los contragolpes y se fue al descanso largo en ganancia 40 a 26.

Tras las charlas en vestuarios, el local sacó la máxima de 15 (43-28) con una bomba de Byró, al minuto de juego. Empero, Olímpico regresó a su esencia de desnivel individual y emparejó el trámite, aunque padeció reiteradas pérdidas de balón en el manejo. Por su parte, Lanús continuó disfrutando de distancias interesantes, respaldado en un goleo repartido y una sana intención del pase extra. Por eso la paridad mantuvo la brecha y el Granate clausuró el chico 59 a 45.

El último cuarto siguió exhibiendo a un Lanús aplomado, con solvencia para conducir los hilos, que a los 5 minutos ganaba 64-49, con Guaita (4) y Boccia (4) como productores. Sin embargo, la historia dio un vuelco rotundo en un sesenta segundos, donde Olímpico generó una corrida frenética de 10-0, fundamentado en el desequilibrio de Lloreda (6) y Villares (5), para acechar 59-64. A partir de ese punto, el encuentro se movió bajo la órbita del dramatismo, dado que De Groat (15) se calzó el traje de superhéroe y desbarató toda la estantería del local. Motivados y corajudos los de Miravet se pusieron 69-70, con 1:40 minutos en el reloj, justo cuando el Granate desperdició cuatro libres consecutivos. En ese tramo decisivo apareció la figura de Byró (7) para hacerse cargo del peso de las ofensivas, sumado a algunos recuperos defensivos originados en la contracción colectiva y Lanús se desahogó para festejar la victoria.

Síntesis:
Lanús 77:
Juan Pablo Cantero 2, Mariano Byró 15, Adrián Boccia 12, Jamaal Levy 10, Terrel Taylor 10 (Fi); Nicolás Laprovíttola 14, Facundo Giorgi 6, Diego Guaita 6 y Chris Hayes 2. DT: Silvio Santander.

Ciclista Olímpico 71: Matías Ibarra 0, Denham Brown 6, Fernando Malara 0, John De Groat 27, Jaime Lloreda 11 (Fi); Jonatan Machuca 4, Cristian Amicucci 6, Cristian Romero 10 y Eduardo Villares 7. DT: Gustavo Miravet.
Parciales: 19/10, 21/16, 19/19 y 18/26.
Árbitros: Roberto Smith y Julio Dinamarca.
Estadio: Antonio Rotili (800)

Crónica: Télam