El base cordobés Bruno Lábaque decidió continuar en el club que lo vio nacer, y que presidirá su padre: Atenas de Córdoba. Se suma así a un proyecto ambicioso, que ya contrató a los olímpicos Rubén Magnano (DT) y Leo Gutiérrez, al tirador Juan Manuel Locatelli y al base Juan Pablo Figueroa, y va por más.

La Liga 2002/2003 fue la última que se adjudicaron los Griegos. Por eso Felipe Lábaque apostó por las contrataciones de alto impacto. Su más reciente logro es haber retenido a su hijo Bruno, uno de los símbolos de la institución en la última década, pretendido por equipos capitalinos.

En la pasada temporada el base de 30 años y 1.78 mts, en 42 partidos disputados promedió 10,7 puntos (30,1% triples, 54,6% dobles y 74,6 libres), 3,2 rebotes, 4,2 asistencias,1,4 recuperos, 1,8 pérdidas y 31,8 minutos.

Jugará su 12º temporada con los Verdes, con quienes obtuvo las Ligas de 1997/98, 1998/99, 2000/01 y 2002/03. En los primeras dos obtenciones su entrenador fue Rubén Magnano, mientras que con Leo Gutiérrez formaron parte del mismo equipo campeón de las temporadas 1998/99 y 2001/02. También ganó el Panamericano de clubes en 1996, la Liga Sudamericana de los años 1997 y 1998 y el Sudamericano de 2004.

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