Con su tranco va destilando una aureola de talento y magia sobre los listones. A pesar de su frescura denota una capacidad pasmosa para conducir, así como evidencia una proyección de crecimiento sin límites. Su alegría despierta el orgullo de su hábitat, que lo acompañó en toda su evolución.
El base del Club Atlético Lanús, Nicolás Laprovíttola (22 años y 1.85 metros), fue confirmado como uno de los integrantes de la lista de 15 preseleccionados para el combinado argentino que disputará los Juegos Olímpicos de Londres 2012. El armador granate iniciará la concentración del plantel nacional el 23 de junio. En tanto, en la actualidad se encuentra en la etapa de preparación para el 45º Campeonato Sudamericano de Mayores de Chaco, que se desarrollará del 18 al 22 de junio.
La inclusión del oriundo de Morón en un círculo tan exclusivo, como el elenco argentino, despertó la algarabía del Club Lanús, donde todos los estamentos expresaron su orgullo por esta convocatoria. El vínculo de la institución con el base ostenta un lapso extenso, que comenzó en el 2007, cuando se acopló al plantel que consiguió el ascenso del TNA. Luego, el organizador de juego participó en las cuatro temporadas del Granate en la Liga Nacional, con un total de 200 partidos disputados, con una media global de 7.8 puntos, 2.6 asistencias y 24 minutos.
El protagonista de esta historia granate retozaba en una habitación de hotel en Charata, en la provincia de Chaco, donde se entrena con la Selección Argentina. En medio del descanso, y con sus sentidos alborotados, Laprovíttola expresó sus concepciones de esta noticia tan trascendente. El armador comenzó enunciando las emociones que experimentó con la certificación de su convocatoria: “La verdad fue increíble, no pensaba que podría llegarme esta oportunidad, menos con la edad que tengo. Va a ser algo nuevo para mi, más allá de quedar o no, esta experiencia hay que usarla para aprender y crecer”.
Esta vivencia que florece en el sendero de Laprovíttola dispone de un tinte místico y así lo explica al develar que “es un sueño estar al lado de todos esos monstruos, que hicieron cosas increíbles para el básquet argentino”. Nicolás aprovechó para exteriorizar los pasos a seguir: “Me lo voy a tomar con mucha tranquilidad sabiendo el lugar donde está uno, poniendo todo en entrenamientos y amistosos para intentar quedar. Llegar hasta acá es muchísimo, pero se puede algo más”.
Por último, el base describió las repercusiones que recibió con la publicación de la noticia y comentó que “fue tremendo, me llamaron mis amigos, familia, mi novia y compañeros. Estábamos todos muy contentos, disfrutando de esto. Es un logro increíble que me esté pasando a mi, como que no caigo, pero sé que tengo que caer para estar listo para este desafío”.
Entrevista: Juan Martinich – Prensa Lanús
