En la primera jornada de la segunda fase ya hubo una sorpresa, ya que luego de 12 partidos invicto cayó Peñarol en Mar del Plata ante Quimsa, por 76 a 71. El goleador del cotejo fue un ex hombre de la casa, Sebastián Vega, con 18 puntos, en tanto que en el “Milrayitas” metió 17 el “Lata” Ibarra.
El principio del cotejo no fue bien jugado por ninguno de los dos equipos, con muy malos porcentajes en tiros de campo, lo que generaban un juego continuado, ya que se marraba en los dos aros y ninguno podía ser constante en sus ataques.
En más de 5 minutos el resultado era de 5-4 a favor del local, que intentaba con Leiva adentro o tirar desde más allá de los 6,75 metros, pero ninguna de las fórmulas le daba resultado. En la visita tampoco funcionaban sus internos, Lo Grippo y Williams, por lo que el “Penka” Aguirre tenía que tomar las riendas.
En el final del primer segmento fue un poco más consistente Peñarol, de la mano de Gutiérrez y Leiva, Quimsa estuvo un poco desconcentrado en las últimas dos jugadas y por eso los de Hernández sacaron una pequeña diferencia.
A pesar de los ingresos de Vega, Villares y Picarelli, la actuación de la visita fue disminuyendo y obligó a que Demti pida tiempo muerto para intentar acomodar sus fichas.
Con Campazzo en la tribuna (cómodamente sentado junto a Safar y Giorgetti), el que se hizo cargo del equipo fue Matías Ibarra, que a pesar de tener un fuerte dolor en su rodilla derecha hizo muy bien las cosas y le dio a Peñarol ventaja de 15 puntos.
Cuando parecía que los de Santiago del Estero podían remontar, con el buen aporte de Vega y los rebotes en ofensiva, el “Milrayitas” le dio una clase de básquet con la sangre joven de Rasio y la experiencia de Terrell.
En el complemento y con un parcial de 6-0, Quimsa entró nuevamente al partido, con la buena participación del puertoriqueño Javier Mojica y el aporte de Lo Grippo, ante un desordenado Peñarol.
Otra vez tuvo que aparecer en escena Matías Ibarra para que el local despertara de ese sueño y volviera a manejar márgenes entre los 8 y 12 tantos.
En el último parcial Quimsa arrancó enfuchado, ya que sabía que el comienzo era importante para poder hacer que Peñarol pierda un poco la calma que tenía. El efecto dio resultado porque llegó a ponerse a tres puntos (63-60), con mucho tiempo por jugar.
Las ofensivas de Peñarol disminuyeron notablemente en su calidad y comodidad para efectuar los lanzamientos y con un score bajo se benefició la visita.
Con 3 minutos por jugar Quimsa consiguió pasar al frente por cuatro con dos triples (Vega – Picarelli), para poner en serios aprietos el invicto de Peñarol.
La jugada clave llegó en una ofensiva sucia de la visita, que parecía que se extinguían los 24 segundos, pero Eduardo Villares sacó de la galera un triple que volvió a dejar distancia de cuatro.
Otra ofensiva complicada le dio un doble a Lo Grippo, para continuar alejando a Quimsa, que con mucho coraje definió las cosas en los segundos finales.
Hubo un par de intentos desesperados de Peñarol con triples a distancia, pero la anaranjada no quiso entrar y el triunfo se fue para Santiago del Estero, lo que le da más relevancia al duelo que tendrán estos equipos, la próxima semana en Corrientes por el Súper 8.
Síntesis:
Peñarol (71): Matías Ibarra 17, David Teague 15, Marcos Mata 8 (X), Leonardo Gutiérrez 12, Martin Leiva 11 (FI) Thomas Terrell 4, Lisandro Rasio 4.
DT: Sergio Hernández
Quimsa (76): Nicolás Aguirre 5, Javier Mojica 8, Ramzee Stanton 9 (X), Diego Lo Grippo 8, James Williams 10 (X) (FI) Damián Tintorelli 6, Sebastián Vega 18, Eduardo Villares 8, Lucas Picarelli 4.
DT: Fabio Demti.
Parciales: 18-13, 40-27, 58-51, 71-76
Árbitros: Roberto Smith – Rodrigo Castillo.
Cancha: Polideportivo Islas Malvinas.
Crónica: Lucas Currá – Especial para Infoliga
Fotos: Demián Schleider www.infoliga.com.ar
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