Magnano: «Me siento muy feliz»

Rubén Magnano está feliz y no lo oculta. Está orgulloso y tampoco lo oculta. Y no es para menos. Su Atenas, el que proyectó primero, al que le puso nombres propios después y al que moldeó a su gusto en la intensa preparación, no para de dar frutos y va cumpliendo uno a uno los […]


Rubén Magnano está feliz y no lo oculta. Está orgulloso y tampoco lo oculta. Y no es para menos. Su Atenas, el que proyectó primero, al que le puso nombres propios después y al que moldeó a su gusto en la intensa preparación, no para de dar frutos y va cumpliendo uno a uno los objetivos. Ya logró el primer título de la temporada, la Copa Argentina, ya clasificó al Súper 8 (donde se jugará una plaza en la Liga Sudamericana) y cerró el mejor arranque de su historia en la Liga Nacional, con 13 triunfos consecutivos. “Me siento muy feliz y se lo dije a los jugadores después del partido con Sionista. Más allá del récord de victorias, por corresponder en la cancha a toda la gente que confía en nosotros, a la gente que llena la cancha y a los dirigentes”, destacó Magnano.

“Los objetivos los estamos cumpliendo con creces, aunque ahora hay que pensar, ponerle paños fríos a todo esto que se generó para encarar el Súper 8 y la segunda fase de la Liga”, añadió el exitoso entrenador. “Que se cumplan las pautas tiene que ver con el trabajo de la semana, que a la postre te lleva a plasmarlo en la cancha. Esa es la satisfacción mayor”, destacó el DT, tres veces campeón con Atenas en la Liga Nacional.

Atenas recibió una media de sólo 64 puntos en contra, ¿qué tiene de especial la defensa del equipo?
El convencimiento que alimenta la confianza. Esto le otorga un plus a la defensa que hacemos. Con la entrega cortamos las vías del rival, los forzamos muchas veces a tirar apurados y hacemos la diferencia.

Debe ser reconfortante para usted, que privilegia la defensa, que se destaque ese aspecto de Atenas.
Es gratificante, no hay dudas que se remarque cómo defiende Atenas, a todos nos gustan los elogios. Aunque soy cauto a la hora de leer y escuchar lo que se dice del equipo porque en el deporte profesional hoy sos un héroe y mañana un villano.

¿Al equipo se le exigirá más por el rendimiento que mostró?
Los jugadores están actuando al máximo, se esfuerzan al 100 por ciento. Después hay variables, como los porcentajes en triples, que hasta nos pueden llevar a perder, pero sabemos que este camino nos da resultados. Los objetivos planteados se están cumpliendo y tenemos otros a la vista, como ganar el Súper 8 para ir a la Liga Sudamericana, aunque sabemos que cada vez será más difícil porque el apetito del rival crece, somos el equipo a batir.

Se le exigirá ser campeón.
A diario le insuflamos grandes desafíos, soñar con cosas importantes, con resultados valiosos. Soñamos con el título, y lucharemos por conseguirlo.

¿Cuándo no se le exigió un título a Atenas?
En las últimas campañas…
Yo siempre lo viví. Empezábamos la pretemporada con la exigencia de salir campeón.

La doble responsabilidad por armar el equipo

“Este equipo era toda una incógnita, pero con este andar nos ilusionó a todos”, remarcó Rubén Magnano cuando se le consultó sobre la conformación del plantel, armado en su totalidad por él. “Primero me sentí complacido enormemente por formar el equipo, algo que nunca había pasado en la historia de Atenas y a la vez una doble responsabilidad, más allá que pienso que así tiene que ser”, destacó el entrenador de los verdes.

“No escapo a la responsabilidad porque cuando se gana o pierde los responsables son las tres patas, los jugadores, el cuerpo técnico y los dirigentes. En Atenas estamos metidos todos en el mismo barco y no me afecta ni me preocupa por haber elegido a los jugadores. Es más, estoy contento por haber seleccionado estos jugadores”, añadió.

¿Todos los jugadores respondieron según sus expectativas?
Si. Están muy bien, dieron un salto de calidad, que era lo que buscaba, siempre tratamos que mejoren su juego, y todavía pueden dar mucho más, seguirán creciendo. Con todos ellos dialogamos antes de firmar y sabían cuales eran las condiciones.

La Mañana de Córdoba