El secretario general de FIBA y miembro del Comité Olímpico Internacional, Patrick Baumann, reconoció que la situación en Turquía, sede del próximo Mundial de Básquetbol, «no es fácil» y apuntó que tienen de plazo hasta mayo para solucionar el problemas de infraestructuras que sufren para organizar con garantías el evento.

«La situación no es fácil y el problema está en la construcción de estadios. En Turquía son capaces de hacer cosas rápidamente, cuando quieren lo saben hacer, pero hay que empezar. Tenemos todavía dos o tres meses para decidir donde ir, para Turquía no es bueno, nos reunimos con ellos y quieren el Mundial», explicó en el Foro Fundación Ferrándiz – As.

Baumann, además, es optimista y recuerda que la «ventaja es que Turquía no sufre tanto la crisis económica» y subrayó que tienen de plazo para lograr las infraestructuras necesarias hasta el Central Board de FIBA en mayo, «un plazo razonable para tomar decisiones porque más tarde sería imposible por la organización».

FIBA, además, se mostró muy sensible ante las discrepancias entre la ULEB y la Euroliga por el nuevo formato de competición. «Parece que no nos quitamos este problema de encima y estamos perdiendo el tiempo en estas peleas, ya hemos perdido 8 años para ver que no estamos mejor en términos económicos, de importancia», recalcó.

«FIBA lleva mediando estos años, pero uno se cansa. Ahora la diferencia es entre ULEB y Euroliga. No estamos contentos si alguien va a los tribunales. El baloncesto está creciendo y no para ir en las páginas judiciales», criticó sobre la situación.

Baumann explicó que se ve que hay dos concepciones diferentes «que se enfrentan». «La Euroliga quiere crecer, pero tienen que entender que la base de la competición son los campeonatos nacionales y hay que encontrar fórmulas, porque los clubes que no tengan la fortuna de ir, ¿con quién van a jugar?. También hay otros problemas, porque no hay tantos clubes que puedan permitirse sólo jugar a nivel internacional. Que los responsables se sienten y dialoguen para encontrar una solución para crecer», pidió el miembro del COI.

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Baumann no escondió que la final olímpica de baloncesto, que gozó de «audiencias impresionantes», ha permitido a su deporte dar un salto en el ranking del COI. «El principal deporte era el atletismo, pero el que le siguió fue el baloncesto en estos Juegos. Nos propulsó arriba en el ranking de los Juegos y es que las encuestas muestran que el deporte fue visto en el mundo entero y con audiencias impresionantes», señaló.

Como secretario general de FIBA, señaló que están pendiente del «mundo entero» y destacó los «potenciales menos conocidos como Asia y Africa», que por el momento «no tienen estabilidad de resultados, pero sí talentos». «China, por ejemplo, ha mejorado en los últimos años con inversiones de NBA, Europa es fuerte, pero falta ver cómo evolucionan países como Polonia o Ucrania», destacó, señalando que falta ver a países como Brasil «que le falta estar arriba, pero que cuenta con grandes jugadores».

Así, espera que con la creación de competiciones como la primera edición de los Juegos Olímpicos de la Juventud, que se estrenará en Singapur, sirva para que otros países tengan «oportunidades de crecer aún más y para así poder trabajar con los jóvenes, siempre de cara al futuro».

Sin embargo, el dirigente de FIBA no fue del todo optimista porque «no todo es de color de rosa». «Estamos felices porque crecemos, los equipos nacionales son importantes, contamos con patrocinadores que invierten, pero fuera la situación no es tan buena, hay problemas económicos y el deporte va a sufrir porque afectará a nivel de clubes y habrá que ver cómo se soluciona. Hay que tener cuidado», advirtió.

LA NBA NO PRESIONA

«La NBA no presiona. Ellos empiezan a entender que el baloncesto internacional tiene un nivel que es más alto que el de ellos, a excepción de grandes jugadores. No nos han presionado y tenemos una relación muy buena con ellos. Nos reunimos muchas veces y se discute lo que puede ser mejor para el baloncesto en el futuro. Al final tenemos que tomar decisiones, pero no en función de ellos y sí por el bien del baloncesto en el mundo entero», explicó, subrayando que es más complicado a nivel de temas de dopaje, ya que no pueden imponer en la NBA el código de la AMA pese a que cuando la selección americana se junta «no hay ningún problema» con dicho código.

«Sin Estados Unidos, el Mundial y los Juegos Olímpicos no serían lo mismo porque son una pieza maestra del baloncesto en el mundo y se merecen estar ahí», advirtió sobre la presencia de los norteamericanos en las grandes citas internacionales.

Por último, Patrick Baumann citó a todos los presentes a finales de septiembre de este año, justo después del Eurobasket de Polonia, en la Fundación Ferrándiz para conocer a «los seis personajes del baloncesto mundial que entrarán en la clase de 2009 del Salón de la Fama de Alcobendas».

Esta conferencia, además, contó con la asistencia del secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, el presidente de la Federación Española de Baloncesto, José Luis Sáez, del mandatario de la FEB, y de la ACB, Eduardo Portela, así como ex jugadores como Fernando Romay, Clifford Luyck o Lolo Sáinz.

Informe: Europa Press