Brasil goleó a Uruguay

Brasil apretó el acelerador en el segundo tiempo y superó con holgura a Uruguay 93-66. Benite fue el goleador en el equipo de Magnano con 21 tantos.

Brasil no se dejó sorprender por Uruguay y se mantiene en el lote de punta al cerrar con victoria de 93/66 y quedar detrás de la Argentina (8) y junto Dominicana y Puerto Rico con 7.

Vitor Alves Benite volvió a rendir desde el banco (25 minutos) con 21 puntos – 11 en el último corte – con 3/3 dobles y 5/7 triples. El alero de Limeira, equipo del interior de San Pablo, destacó en un conjunto que repartió el goleo ya que tuvo 4 jugadores con 10 ó más puntos y Huertas y Tiago, sus mega figuras, metieron 9 puntos cada uno. En conjunto, Brasil tuvo gran puntería: 10/18 triples (56%).

Uruguay sufrió las ausencias de Osimani y Aguiar, lesionados. Si bien el goleador uruguayo fue Sebastián Vázquez, con 12 puntos, la figura oriental fue Sebastián Izaguirre que en el segundo tiempo entró para anotar 11 puntos (2/3 dobles, ½ triples y 4/5 libres) y 4 rebotes.

Brasil quebró el juego al inicio del tercer cuarto. Metió un parcial de 11/0 que era la continuidad de un buen cierre del primer tiempo (4/0), luego de una antideportiva cobrada a Leandro García Morales. Allí la escuadra de Rubén Magnano escapó 53/34 y, con el retorno de los titulares, cerró 24 arriba el parcial: 70/46.

Uruguay no pudo y García Morales no encajó contra las diversas defensas brasileñas. Zona y personal. Terminó frustrado con 0/3 de campo y 2 perdidas en 14 minutos sólo de acción.

Brasil jugará mañana con Panamá y Uruguay será adversario de República Dominicana.

Gerardo Jauri, entrenador uruguayo apuntó que “tratamos de minimizar las corridas de Brasil, sabiendo que su transición defensiva/ofensiva es terrible, pero ellos supieron aprovechar nuestros errores y se alejaron en el marcador”.

“Aprovechamos las ausencias de Uruguay, tratamos de no desconcentrarnos, hacer una buena defensa y sacar el partido adelante”, dijo Rubén Magnano, coach brasileño en conferencia de prensa.

Consultado si esta había sido la noche más tranquila para Brasil, Magnano, siempre serio, dejó entrever una sonrisa…”no, de tranquilidad nada….este tipo de torneos no te permite disfrutar las victorias ni llorar las derrotas, al otro día hay que volver a jugar”.

Crónica: Prensa Mar del Plata 2011